Ai Weiwei pide presionar a China para que deje Liu Xiaobo viaje a Alemania
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Liu Xiaobo, uno de los disidentes más destacados de China, fue excarcelado recientemente por un cáncer de hígado terminal y se encuentra ingresado bajo vigilancia policial en un hospital de Shenyang.
El artista y activista chino Ai Weiwei duda de que Pekín permita a su amigo y premio Nobel de la Paz Liu Xiaobo salir del país y considera que Berlín debería redoblar sus presiones para que pueda viajar a Alemania, adonde quiere ir "para tener un último momento de libertad con sus familiares”.
"Creo que el Gobierno alemán hizo mucho, pero nunca lo suficiente", dijo en una entrevista con el canal internacional alemán Deutsche Welle.
Liu Xiaobo, uno de los disidentes más destacados de China, fue excarcelado recientemente por un cáncer de hígado terminal y se encuentra ingresado bajo vigilancia policial en un hospital de Shenyang, capital de la provincia de Liaoning (norte), donde este fin de semana fue visitado por médicos especialistas de EU y Alemania.
La familia quiere buscar asistencia médica en el extranjero, pero las autoridades chinas se niegan argumentando que no podría aguantar un viaje de larga distancia.
"Realmente depende de la presión internacional", opinó Ai, quien confió en que el Gobierno de Angela Merkel pueda tratar a un defensor de los derechos humanos con el mismo amor que da a los pandas que han llegado al zoo de Berlín desde China.
Merkel recibió la pasada semana al presidente chino, Xi Jinping, que hizo una visita de Estado a Alemania antes de la cumbre del G20, y juntos visitaron a los pandas en el zoo.
El portavoz del Gobierno, Steffen Seibert, no quiso revelar ayer las conversaciones "confidenciales" de Merkel y Xi, pero garantizó que el caso de Liu es una "gran preocupación" para la canciller, que desearía "un signo de humanidad" para el activista y su familia.
"Sin personas como Liu Xiaobo, no hay futuro", afirmó Ai Weiwei, quien recordó también que tampoco hay futuro sin gobiernos que reivindiquen los derechos humanos por hacer tratos con el Gobierno chino.
Ai Weiwei reside y trabaja regularmente en Berlín, adonde llegó tras cuatro años sin poder salir de su país.