Desplazados por la violencia en Guerrero, sin agua ni comida
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Campesinos se opusieron a que sus comunidades fueran ruta de trasiego de drogas
Ciudad de México. Mariana explica que ese es un grave problema que se padece en la región. Los niños tienen que estar casi todo el día escarbando en el río seco para extraer un poco de agua. No tenemos agua ni para beber, ni para bañarnos, mucho menos para lavar ropa. No llovió y el río se secó, lo mismo que lo que sembramos, porque no hubo agua.
Su hermano, Damián Díaz, interviene en la plática y comenta que presentaron al gobierno un proyecto para un sistema de riego, pero tiene un costo de un millón de pesos. Mientras da detalles, su hijo, Damián, de seis años, junto con otros niños escarba a orillas del río para tratar de obtener un poco de agua y llevarla a sus casas.
Recuerda que en agosto de 2013 el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) entregó a los desplazados nueve inmuebles, pero no tienen cimientos ni varillas, tampoco cuentan con el mínimo de servicios. En época de lluvias se mete el agua, y ahora con el calor es insoportable habitarlas.
Manuel Olivares, de la Red de Organismos de Derechos Humanos de Guerrero, asegura que las 156 personas oriundas de Coyuca de Catalán, en la Tierra Caliente, que actualmente viven en Puerto las Ollas, colonia Libertad de la Unión y Tepango, son consideradas las primeras desplazadas por la violencia.
Explica que estas familias eran propietarias de 16 mil hectáreas, donde había agua y abundante vegetación; además, sembraban y tenían ganado, mientras aquí solo les dieron 10 hectáreas para todos, bajo el estatus de refugiados.
Recordó que el problema se inició cuando grupos de la delincuencia organizada exigieron una ruta para la siembra y traslado de droga, así como para el tráfico de la madera, a lo que los campesinos ecologistas se opusieron. Queremos que el gobierno cumpla con su promesa de darnos tierra, alimentación, agua, y sobre todo justicia, reclamó.
Dijo que la lucha por la defensa de los bosques surgió con la creación de la Organización de Campesinos Ecologistas de la Sierra de Petatlán y Coyuca de Catalán, fundada en 1998, y desde entonces ha sido duramente combatida por el Estado mexicano. Agregó que dos de sus fundadores, Rodolfo Montiel Flores y Teodoro Cabrera García, fueron encarcelados.