Fitch ve probable desaceleración de la economía mexicana este año
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De acuerdo con el informe "Visión general del crédito soberano de América Latina" publicado este miércoles, considera probable que México, al igual que Perú y Chile
Fitch Ratings consideró probable que la economía de México experimente una desaceleración moderada este año, mientras que el nuevo gobierno ha enviado señales mixtas sobre política económica.
De acuerdo con el informe “Visión general del crédito soberano de América Latina” publicado este miércoles, considera probable que México, al igual que Perú y Chile, experimenten desaceleraciones moderadas en 2019.
Para Brasil y Colombia, la calificadora internacional de riesgo crediticio prevé que el crecimiento económico aumente este año, pero solo a 2.1 y 3.3 por ciento, respectivamente, en tanto que en Argentina y Venezuela deberían continuar las contracciones anuales.
En México, el nuevo gobierno envió señales mixtas sobre políticas económicas, ya que por ejemplo el presupuesto de 2019 y las declaraciones recientes de política fiscal mantienen excedentes primarios e indican una continuación del marco fiscal existente.
“En general, la administración parece estar siguiendo la continuidad de la política macroeconómica”, destaca la agencia evaluadora.
Sin embargo, precisa, la decisión de cancelar el proyecto de construcción del aeropuerto de la Ciudad de México y otras intervenciones de política microeconómica, como la congelación de las implementaciones de la reforma energética, apuntan a otras áreas de incertidumbre política.
La agencia expuso que las presiones de calificación negativas han aumentado para algunos soberanos de América Latina en los últimos seis meses, pues revisó las perspectivas de cuatro países (Argentina, Ecuador, Guatemala y México) de estable a negativo, desde el comienzo del cuarto trimestre de 2018.
Como resultado, ocho soberanos en la región ahora tienen perspectivas negativas, mientras que ninguno tiene una perspectiva positiva. Estas presiones de nota reflejan una serie de factores dentro de un entorno de crecimiento económico lento global que está desafiando los esfuerzos para consolidar las cuentas fiscales y estabilizar las cargas de la deuda, explica.