Muere Naná Vasconcelos, ícono brasileño de la percusión
COMPARTIR
TEMAS
Elegido ocho veces mejor percusionista del mundo por la revista de jazz "Down Beat", Naná será velado hasta hoy por la mañana en la sede de la Asamblea Legislativa de Pernambuco.
El músico brasileño Juvenal "Naná" Vasconcelos, ícono de la percusión en todo el mundo, murió hoy a los 71 años víctima de un cáncer de pulmón.
El multipremiado artista, ganador de ocho premios Grammy, estaba internado desde hace diez días en el hospital Unimed III de su ciudad natal, Recife.
Según sus médicos, el músico no resistió el avance de la enfermedad, contra la que luchaba desde el año pasado. Murió tras sufrir un paro respiratorio.
Elegido ocho veces mejor percusionista del mundo por la revista de jazz "Down Beat", Naná será velado hasta hoy por la mañana en la sede de la Asamblea Legislativa de Pernambuco.
Artistas de todo Brasil acudieron a rendir el último homenaje a Vascocelos, que desde muy niño comenzó a interesarse por la música y acabó siendo una referencia mundial en jazz y world music.
En más original de esos tributos tuvo lugar en el centro de Recife, donde músicos de varias partes de Brasil se reunieron "reverenciar al maestro" con un peculiar "minuto de barullo".
"Lo que llamamos barullo es el sonido de percusión bien alto, para que él pueda oírnos homenajeándolo", dijo el promotor del tributo, el músico Tostao Queiroga, citado por el portal "G1", del grupo Globo.
Su viuda, Patrícia Vasconcelos, quien además era su productora, dijo a medios locales que el músico se sintió mal poco después de realizar su última presentación, el 28 de febrero en la ciudad de Salvador de Bahia, junto al violinista Lui Coimbra. Al regresar a su casa en Recife, Naná fue ingresado al hospital.
Pese a que el año pasado tuvo que someterse a radio y quimioterapia para combatir el cáncer, igualmente participó este año en febrero en el último carnaval de su vida.
Nacido el 2 de agosto de 1944, Naná se relacionó con la música desde muy joven, tocando en cabarets y participando del movimiento de "maracatú" de Pernambuco, ritmo que combina la religión cristiana con las divinidades de las religiones afrodescendientes.
El "genio" de los tambores también dominaba el berimbau, instrumento utilizado por los practicantes de "capoeira" -mezcla de danza, arte marcial y lucha que viene de la época de los esclavos-.
Su talento lo llevó a grabar o compartir escenarios con verdaderas leyendas de la música internacional, como el grupo Jazz Codona, B.B King, el violinista Jean-Luc Ponty, Miles Davis, Art Blakey, Tony Williams, Don Cherry, Oliver Nelson y la banda punk Talking Heads, entre otros.
Fuera de los escenarios, que también compartió con compatriotas de la talla de Milton Nascimiento, Caetano Veloso, Gilberto Gil y Gal Costa, Naná impulsó diversos proyectos sociales.