Usando Instagram pedófilo logró abusar de al menos 96 niños, serían hasta 500

Internacional
/ 11 febrero 2021

David Wilson creó y usó identidades falsas para contactar víctimas en línea. Envió imágenes sexuales de mujeres jóvenes a cambio de que los niños le enviaran imágenes y videos de ellos

La Agencia Nacional del Crimen (NCA) de Gran Bretaña, condenó a David Wilson de 36 años, a 25 años de prisión, esto después de declararse culpable de 96 cargos de abuso sexual infantil. Los jueces dijeron que es uno de los pedófilos más prolíficos que jamás hayan investigado.

La audiencia se realizó en Ipswich Crown Court, Gran Bretaña, donde la Agencia Nacional del Crimen dijo que hay evidencia de hasta 500 niños que le enviaron material de abuso, el hombre se acercó a más de 5 mil niños en todo el mundo por internet.

El juez Rupert Overbury, sentenció a Wilson a 25 años de prisión y ocho más con licencia extendida. Además, lo describió como un pedófilo en serie:

“Realizaste una campaña larga y premeditada de abuso sádico y manipulador de niños pequeños a través de las redes sociales. Cualquier ser humano decente quedará asombrado por el nivel de depravación involucrado. Hubo un elemento sádico en su ofensa, incluido el chantaje y una persecución implacable de niños vulnerables que a menudo suplicaban clemencia”, dijo el juez.

David Wilson creó y usó identidades falsas en las redes sociales para acercarse a niños y contactar víctimas en línea. Con teléfonos no registrados envió imágenes sexuales de mujeres jóvenes desde internet a cambio de que los niños le enviaran imágenes y videos de ellos mismos.

Los delitos se cometieron entre mayo de 2016 y abril de 2020.

Tony Cook, jefe de operaciones de abuso sexual infantil de la NCA, dijo que el hombre creó terror entre las víctimas e ignoró cualquier súplica:

“A pesar angustia que las víctimas estaban sufriendo, ignoró cualquier súplica de ellas para que se detuvieran hasta obtener lo que quería y en algunas ocasiones distribuyó imágenes a los amigos de las víctimas”.

La investigación arrojó que muchos niños sintieron ganas de suicidarse.

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