Clientes exigen a tienda ubicada en el bulevar Coss de Saltillo cumpla promoción
Clientes de la tienda, ubicada en el centro de Saltillo, decidieron permanecer en la sucursal hasta que se les hiciera válida una promoción de edredones en $75
Alrededor de las 20:00 horas de este miércoles, uno de los primeros clientes llegaron a la sucursal Soriana Coss con la intención de llevar varios edredones, puesto que ya sabía que estaban en liquidación, esa era la idea, hasta que el gerente de la tienda impidió la venta.
Mario Rodríguez es uno de los clientes que permaneció en la tienda con el objetivo de llevar alrededor de nueve edredones, argumentando que la promoción estaba pasando en la caja y los verificadores.
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Una vez llegada la hora de cierre solo permanecieron en la tienda el persona de caja, el gerente y los miembros de seguridad de la sucursal, además de los clientes que sustentaba la validez de la promoción con tickets de otras sucursales.
“Yo llegué a la sucursal porque una amiga cajera me dijo de la oferta, cuando yo llego aquí solo me querían dejar llevar 5 edredones, al pasar la noche lo bajaron a tres y ahorita solo quieren que llevemos 2”, declaró uno de los clientes a las 11:15 de la noche.
Según los testimonios, el personal en tienda apagó los verificadores de precios para que los clientes “no pudieran demostrar que sí estaba pasando la promoción”, esto debido a que los verificadores arrojaban 75 pesos por cada edredón.
Los clientes afirman que el gerente de la sucursal, quien se identificó como Eduardo Martínez, es quien se negó a hacer la venta, aunque mostraran fotos de otras sucursales donde se realizaban transacciones de hasta 15 piezas.
Tras la negación en el personal los decidieron obstruir las cajas en forma de protesta hasta que se atendieran sus demandas, para las 11:35 de la noche los clientes permanecían bajo llave negociando con el personal
A la llegada de VANGUARDIA se le negó el acceso e incluso se cerró media cortina con el objetivo se impedir que se tomaran fotos y video, incluso impidiendo a los clientes salir, condicionando a que si daban una entrevista a este medio era afuera y sin posibilidades de volver a entrar.