Coahuila: atender una denuncia implica un costo aproximado de 200 mil pesos para el Estado

Olga González Álvarez, directora de Métodos Alternos en la Federación Iberoamericana de Abogados, informó que atender un solo caso de denuncia representa para el Estado un costo de 200 mil pesos en promedio, cuando el asunto implica el cobro y pago de 20 mil pesos o menos. Por ejemplo, al momento de denunciar se echa a andar todo el aparato del Poder Judicial, por eso la importancia de educar en la mediación.

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Señaló que en el Colegio San Alonso de Monterrey, donde es directora, imparten clases de mediación de conflictos en los niveles de preescolar, primaria, secundaria y preparatoria. Con esto, los alumnos aprenden herramientas para dirimir conflictos, comunicar sus emociones y sentimientos, materias que también impartirán en otros planteles privados de Coahuila.

Con esta formación, que llevan aplicando 10 años en Monterrey, los jóvenes cuentan con mecanismos para evitar involucrarse en conflictos legales que pueden resolverse mediante el diálogo y la conciliación.

Con la mediación, explicó, se puede evitar que más del 30 por ciento de los conflictos lleguen a los juzgados, lo que representa un costo elevadísimo para el Poder Judicial. Se calcula que atender un solo caso implica un gasto de 200 mil pesos por la movilización de todo el aparato de justicia.

“Como expertos en métodos alternos de solución de conflictos, podemos ahorrar al Estado una cantidad considerable en tiempo, dinero y esfuerzo. Es fundamental generar educación desde la niñez, para que las personas sepan que pueden resolver conflictos mediante mecanismos ya existentes en la ley”.

Echar a andar el aparato judicial para resolver un solo caso representa un gasto estimado de 200 mil pesos cuando el asunto implica un cobro y pago de 20 mil pesos o menos, por ejemplo.

“Es ilógico; esto le cuesta mucho al Estado por la falta de cultura en educar a las personas para que sean capaces de resolver conflictos con medios alternativos y así evitar procesos costosos: emocionalmente, económicamente y socialmente. En una hora de sesión muchas veces se puede resolver un conflicto porque el problema subyace en la comunicación”, expuso.

Esta educación en solución de conflictos, indicó, debe ofrecerse desde preescolar, como se hace en el Colegio San Alonso de Monterrey, y debería implementarse en otros planteles privados de Coahuila.

“Tengo un programa de educación socioemocional que los niños siguen desde preescolar. La Secretaría de Educación Pública debería incluir en el currículo la materia de mediación de conflictos, que puede llamarse así o inteligencia emocional, para que los niños aprendan a resolver conflictos con sus propias habilidades y entiendan que no deben pelear con todos porque piensen diferente, sino aprender a respetar a las personas”, dijo González.

Se necesita, añadió, aprender la comunicación asertiva y compasiva para entender el pensamiento de otras personas, comprendiendo el contexto en el que les tocó vivir o viven. Cuando se entiende eso, los conflictos disminuyen y los delitos bajan, aseguró.