Coahuila: ¿Sabe cuál es la enfermedad que aumentará su incidencia por el cambio climático?

Frente a un mundo en constante cambio, impulsado por diversos factores y acontecimientos como el cambio climático, que agrava algunos problemas de salud, como el asma; expertos señalan desafíos en la relación entre esta enfermedad y el medio ambiente.

Hoy en día, el asma afecta a 262 millones de personas en todo el mundo y se caracteriza por síntomas como tos, dificultad para respirar, opresión en el pecho y silbidos, y está vinculada a una respuesta inmunológica llamada inflamación tipo 2.

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En México, el asma es un trastorno respiratorio que afecta a 8.5 millones de personas y es una de las principales enfermedades no contagiosas.

En la Región Sureste de Coahuila, y probablemente en todo el Estado, la calidad del aire es preocupante y está generando enfermedades inflamatorias crónicas de las vías respiratorias, como el asma, la cual ha tenido un incremento de 67 por ciento en los casos que se reportan.

-¿Cómo se relacionan el asma y el cambio climático?-

En la actualidad, vivimos en áreas urbanas con niveles significativos de urbanización, donde diversas formas de contaminación del aire, como el ozono, dióxido de nitrógeno y la contaminación relacionada con el tráfico, pueden desencadenar o empeorar los síntomas del asma.

La situación se vuelve más preocupante si consideramos que estudios recientes sugieren que para el año 2025, el número de personas con asma aumentará en 100 millones en todo el mundo debido al estilo de vida en las ciudades.

Especialistas señalan que “esta enfermedad provoca la reducción de los bronquios, produciendo síntomas de aumento de frecuencia cardiaca y que imposibilitan la respiración”. Otro de los desencadenantes más comunes del asma en infancias y adolescencias, dijo, son las infecciones respiratorias virales, tales como el Virus Sincitial Respiratorio (VSR), la influenza y las infecciones por parainfluenza.

IMPACTO DEL CAMBIO CLIMÁTICO EN LAS PERSONAS

Aunque los cambios en el medio ambiente afectan la salud de diferentes grupos de población, los niños, los adultos mayores y las personas con enfermedades preexistentes, como el asma, corren un mayor riesgo de enfermedades cardiorrespiratorias o de empeoramiento de sus síntomas en episodios de mala calidad del aire.

Por ejemplo, los bebés expuestos a altos niveles de contaminación del aire tienen más probabilidades de desarrollar sibilancias persistentes a medida que crecen, y los niños expuestos a contaminantes hasta los siete años tienen un mayor riesgo de desarrollar asma.

Esta es una situación crítica, ya que el asma ya es una de las enfermedades respiratorias más comunes en la población infantil a nivel mundial, sin tener en cuenta los efectos de los cambios medioambientales.

En México, el asma afecta a 6 millones de niños y es la principal causa de atención pediátrica en consultas externas, urgencias y hospitalización, según el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE). Según el estudio GAN, las sibilancias afectan hasta al 26% de los niños escolares y hasta al 23% de los adolescentes.

De acuerdo con datos publicados por el Boletín Epidemiológico de la Secretaría de Salud Federal, en Coahuila las atenciones a casos de asma se dispararon 67 por ciento de un año a otro.

Hasta la semana epidemiológica 14 (mes de abril) se brindaron 441 servicios de salud a personas del género masculino y 658 del género femenino, sumando un total de mil 099 valoraciones mientras que en 2022 se registraron apenas 658 atenciones por la misma causa.

EL POLEN COMO UN DESENCADENANTE DEL ASMA

En la naturaleza, existen otros factores que pueden empeorar los síntomas del asma, y estos se vuelven más graves con los cambios en el entorno, como el aumento de las concentraciones de polen. Esto puede llevar a niveles más altos de rinitis alérgica y exacerbación del asma en personas alérgicas al polen.

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Este problema es especialmente relevante en todo el mundo, ya que se han observado aumentos en los niveles de polen, como en el caso de la Ciudad de México, donde la Red Mexicana de Aerobiología (REMA) informó un aumento significativo en la presencia de polen en el invierno pasado en comparación con enero de 2022.

FUNDAMENTAL PRESTAR ATENCIÓN A CAMBIOS DEL MEDIO AMBIENTE

En este contexto, es esencial prestar atención a los efectos que los cambios en nuestro entorno pueden tener en la salud de las personas que padecen asma, según un especialista en Inmunología de Sanofi.

“Hemos estudiado cómo la inflamación de los bronquios se desencadena cuando se produce una exposición a partículas contaminantes, lo que provoca los síntomas característicos del asma. Sin embargo, en la actualidad, existen enfoques terapéuticos de última generación para abordar la inflamación tipo 2 relacionada con esta enfermedad”, señaló.

El Día Internacional contra el cambio climático, que se celebra cada 24 de octubre, nos recuerda que, además de cuidar nuestro entorno, es importante considerar los desafíos que enfrentan las personas con asma en un mundo donde los cambios en su entorno pueden influir en su salud.