Desaparece ‘Muro de la Bondad’, espacio creado en Saltillo para arropar a los necesitados

La temporada decembrina genera, entre algunas personas, gestos de caridad y empatía con quienes menos tienen o pertenecen a grupos vulnerables, como niños, abuelos y comunidades rurales o indígenas. Tras la desaparición del Muro de la Bondad, solo una cafetería en el centro de Saltillo mantiene durante todo el año el apoyo a personas de escasos recursos.

En la ciudad, el Muro de la Bondad, ubicado al oriente en la zona de San José de los Cerritos, ha desaparecido. Era un espacio público donde personas sin ropa adecuada para enfrentar el descenso de temperaturas podían acudir y tomar prendas donadas por la gente.

La expansión comercial en la zona entre el bulevar Centenario de Torreón y el periférico Luis Echeverría Álvarez hizo desaparecer el espacio destinado a esta iniciativa ciudadana.

En el corazón de la ciudad, junto a la Plaza Tlaxcala, se encuentra “Flor y Canela”, una cafetería que mantiene todo el año un programa de alimentación para personas de escasos recursos. Los comensales pueden solicitar a los meseros agregar un café o un platillo extra al costo de su consumo, anotado en un pizarrón visible al público, para ser servido a aquellos que no cuenten con dinero para pagarlo.

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Familias de las etnias Taraumara y Rarámuris, así como personas en situación de calle, han sido apoyadas a lo largo del año en esta acción comunitaria.

La Casa del Migrante, al sur de la ciudad, colecta cada año calzado deportivo en buen estado para que las personas en tránsito puedan cambiar sus tenis desgastados por la travesía desde su lugar de origen.

Por separado, asociaciones civiles y religiosas comenzaron desde noviembre a solicitar ayuda de la comunidad para obtener cobijas, dulces y juguetes que serán entregados antes del 24 de diciembre a distintos grupos vulnerables.

Mujeres que realizan el apostolado religioso también han solicitado el apoyo de la comunidad para colectar gorras, camisas y ropa interior para personas en movilidad. La iglesia de Nuestra Señora de Fátima es la sede para entregar estos objetos el próximo 15 de diciembre.

Esta misma iglesia, al igual que la mayoría ubicadas en la ciudad, incluida la Catedral de Santiago, reciben juguetes, dulces y piñatas para realizar posadas a niñas y niños de comunidades rurales y de la periferia de Saltillo.