En Coahuila le pierden el miedo al COVID y reducen el uso de cubrebocas en un 30% según la Universidad de Washington

Pese a que el uso de mascarilla de forma constante y responsable genera una protección contra el contagio del COVID-19, esta práctica se redujo en Coahuila de acuerdo con datos publicados por la Universidad de Washington en su página covid19.healtdata.org.

La gráfica que se refiere al porcentaje de la población que manifiesta utilizar cubrebocas en espacios públicos, señala que esta actividad pudo reducirse hasta el un 30% desde febrero de 2021 cuando se observó el 90% del uso de esta herramienta de protección.

De acuerdo con las estadísticas del uso universal de cubrebocas, durante diciembre de 2021 se notó una baja que llegó al 78 por ciento, mientras que, para evitar la propagación del coronavirus se requiere que por lo menos el 95% de la población proteja utilice una protección en su rostro.

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Cabe decir que, de acuerdo con las predicciones de la Universidad de Washington, para este 08 de enero se logró el uso de mascarilla en un 80 por ciento, misma cifra que, se espera se mantenga hasta el próximo mes de abril.

CUBREBOCAS REDUCE EL RIESGO DE TRANSMISIÓN

Recordar que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha indicado que la propagación del virus ocurre principalmente a través del contacto cercano de persona a persona, en un diámetro mínimo al de 1.8 metros de distancia, de ahí la importancia de utilizar mascarilla protectora e implementar las medidas sanitarias recomendadas por la autoridad sanitaria.

En ese sentido, VANGUARDIA ha publicado que las mascarillas más efectivas para proteger el sistema respiratorio son las de uso médico que cuentan con tiras que se acomodan alrededor de las orejas o cabeza ya que están diseñadas para alta filtración, adecuada respirabilidad y resistencia a la penetración de fluidos.

Igualmente, se debe colocar el cubrebocas o mascarilla de forma que el ajuste no ciña la piel del rostro y de ninguna manera se deben utilizar cubrebocas con válvulas de respiración pues estas tienen un mayor nivel de filtración de partículas contaminadas.

Al menos así lo han recomendado profesionales de la medicina y pediatras, quienes sugieren evitar el uso de mascarillas de tela y sustituir estas por quirúrgicas desechables que cuenten con certificaciones regulatorias, como lo son las EN 149, US N95, NIOSH 42, o bien, las mascarillas quirúrgicas tricapa que tienen un uso máximo de seis horas; el resto de ellas pueden utilizarse hasta 24 horas.