Manolo Jiménez y sus funcionarios deben gobernar con prudencia, justicia, templanza y fortaleza, dijo Obispo de Saltillo

MONCLOVA, COAH.- Manolo Jiménez Salinas y los funcionarios que ingresan a su gabinete para dirigir a Coahuila durante seis años deben de tener cuatro virtudes, la prudencia, justicia, templanza y fortaleza, señaló Hilario González, obispo de la Diócesis de Saltillo.

Declaró que la Iglesia Católica pide a todas las personas, pero especialmente a todos los funcionarios, que desarrollen estas capacidades para dar mayores resultados a sus representados, en este caso el pueblo coahuilense.

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”Creo que todos tenemos mucho trabajo en esas cuatro virtudes, pero más alguien que dirige. Alguien que lleva la guía debe de saber desarrollar esto, la justicia ante todos los problemas de injusticia que puede haber, la prudencia para tomar las decisiones que en verdad sean para favorecer a todos y la templanza, porque el poder siempre tiene tentaciones de desorden, de abuso, de hacer cosas que no están bien y la fortaleza por que siempre va a haber obstáculos, situaciones adversas variables que no dominamos y nos podemos dar por vencidos, hay que ser fuertes ante la adversidad”, comentó.

Reiteró que todo gobernante debe desarrollar estas virtudes lo mejor posible y lo más importante no olvidar que está para servir a todos, no solo a un partido, una clase social o para un interés.

Exhortó a Jiménez Salinas y sus colaboradores a dar continuidad a las cosas buenas y los logros que se han tenido en la entidad, por el bien común, el bien laboral, el bien económico, la educación y la salud.

Al mandatario le invitó a poner atención en las cosas deficientes del estado, como la problemática de la empresa Altos Hornos de México en Monclova, la violencia, el suicidio, el bullying.