Obras de arte en exhibición de autos clásicos y antiguos en Ramos Arizpe

El Segundo Encuentro de Autos Clásicos, realizado frente a la Presidencia Municipal de Ramos Arizpe, resultó mucho más que eso: miles de personas tuvieron la dicha de apreciar y deleitarse con la exhibición de verdaderas obras de arte, un gozo para la vista y el tacto.

Pickups de la Chevrolet y de la Ford, los 30’s, 40’s y 50´s atrajeron las miradas por su belleza y su estado de conservación, remontando los recuerdos a épocas pasadas.

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Camionetas GMC, una modelo 55, un Buick 55, una Ford 79, un Atlantic 85, vehículos musculosos como se conoce a los Mustang, Charger, Caprice, Montecarlo y un Súper Bee producido y comercializado solo en México, el más veloz del país en su momento, engalanaron las calles aledañas a la plaza principal de Ramos Arizpe.

Un Pontiac 58, un Volkswagen Sedán 56 (muy raro de encontrar por los coleccionistas) y un Mini Cooper inglés compartieron el asfalto con ejemplares Malibú, Valiant, Corvette 75, Jetta, vochos y con un camión de bomberos modelo 62 que todavía presta servicio en el municipio en este municipio.

Gerardo García Castañón, presidente de la Federación Mexicana de Automóviles Antiguos y de Colección, explicó que el evento reunió a más de 150 vehículos expuestos por amantes del coleccionismo y con ello se difunde parte de la historia y de la cultura, pues cada ejemplar habla de determinadas épocas.

“El vehículo tiene una trascendencia histórica, viene con el desarrollo de la industria y del hombre, y se puede ver como un tema recreativo, familiar, de unión y tenemos que llevarlo a la juventud para continuar con esa cultura y esa pasión. No meramente es coleccionar autos, eso es un gusto, pero es todo lo que conlleva alrededor: cultura, historia, conservación, preservación, disciplina, familia”.

La Federación Internacional de Vehículos Ancestros determina que un vehículo se empieza a considerar antiguo a partir de los 30 años, sin embargo, señaló, actualmente hay una polémica porque los coleccionistas consideran que es muy poco tiempo y debe ampliarse a 40 años.

“A partir de 30 años, un vehículo empieza a ser considerado antiguo, y como clásicos están considerados como ciertos vehículos de baja producción o vehículos específicos en producción original”.

Un vehículo clásico, si se quiere conservar como tal, no es modificable, no obstante hay quienes modifican las unidades respetando el diseño y la estructura original.

“Todo depende de qué se está modificando y cómo. Las puertas se están empezando a abrir, incluso en Europa hay puertas abiertas para electrificar vehículos antiguos y eso es un sacrilegio para muchos de nosotros, pero también es una realidad donde los vehículos ya no pueden entrar a muchas ciudades por temas de contaminación, entonces están empezando a electrificar vehículos antiguos”.

Conservar y mantener un vehículo antiguo o clásico no es sencillo. Los propietarios buscan piezas originarias dentro y fuera del país, de lo contrario hay que mandar a fabricar la pieza requerida, con maestros artesanos que también restauran.

Lo que da el valor a un vehículo es complejo explicarlo, porque depende de la demanda-oferta del mercado, de la economía, de la originalidad, del aprecio que le tenga el propietario, incluso si salió o no en alguna serie de televisión.

“No podrías dar crédito que un Volkswagen saliendo de la agencia, de última edición, costó 58 mil pesos y ahora se venden en 400 mil, estamos hablando de más o menos hace 18 años”.

Hay vehículos que cuestan entre 1 y 2 millones de pesos, debido a que se van encareciendo porque hay menos en circulación o hay más gusto por poseerlo.

García Castañón, el primer presidente de la Federación Mexicana de Automóviles Antiguos y de Colección que viene a Coahuila, aseguró que los vehículos modernos no podrán convertirse en clásicos o modernos porque no son restaurables ni lo serán, pueden comprarse y guardarse pero no tendrán esa definición. Son vehículos de corta vida, de 5 a 10 años, y antes eran para toda la vida, aunque en su momento la gente no lo pensara así.

“Son vehículos con altos componentes electrónicos, con una tecnología muy compleja, que aparte de la producción masiva, en una agencia la pieza no la reparas, las cambias, por ende el coche no va a ser restaurable. Serán coleccionables para el que lo compre y lo guarde”.

Héctor Horacio Dávila Rodríguez, presidente de la Asociación de Autos Clásicos de Coahuila, aseguró que este tipo de eventos no podrían realizarse de no existir condiciones de seguridad en el municipio y en el estado.

“Es un éxito, estamos realmente encantados de que la gente participe, tenemos gente de Monterrey, de San Luis Potosí, de León, de Torreón, de Sabinas. Esto es un fenómeno, esto es familiar, esto genera economía porque tienes que comprar las llantas, la batería, pintarlos, realmente es un derrame económico tremendo en este tipo de eventos”, subrayó.