Reemplaza Cinvestav Saltillo pasto por plantas nativas para reducir huella hídrica
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El Centro de Investigación y de Estudios Avanzados instalado en Saltillo reemplazó el pasto por plantas nativas y calculan un ahorro de 3 mil litros de agua por metro cuadrado al año, informó la investigadora Dulce Flores Rentería, al señalar que el personal está comprometido con la protección del medio ambiente.
Al interior de las instalaciones crearon el Comité Ambiental integrado por estudiantes, académicos e investigadores, que han contribuido para hacer de su entorno un lugar más sostenible y agradable para laborar.
La primera gran victoria ha sido la transformación del paisaje que les rodea. Tomaron la decisión de reemplazar la vegetación de pastos exóticos que requerían un elevado consumo de agua por plantas nativas.
“Estas plantas han sido rescatadas de terrenos destinados al cambio de uso de suelo, no solo son más adecuadas y resistentes para nuestro entorno, sino que han contribuido a la conservación de especies locales en peligro de extinción. Hemos rescatado alrededor de mil 500 ejemplares de la región en 4 años y hemos reportado tasas de supervivencia del 80%”.
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“Con este cambio hemos reducido significativamente nuestra huella hídrica, un logro que no solamente beneficia a nuestro Centro, sino que envía un mensaje de responsabilidad ambiental. De acuerdo con nuestros cálculos, el reemplazo de cada metro cuadrado de área verde que teníamos con pasto, significa un ahorro de 3 mil litros de agua en el último año”, indicó.
También colaboran en la separación de residuos, lo que redujo la cantidad de desechos enviados al Relleno Sanitario, y fomentan una cultura de conciencia del cuidado ambiental en toda la comunidad.
“Cada vez que reciclamos, compostamos, estamos tomando medidas concretas para proteger a nuestro planeta y preservar nuestros recursos naturales. Además, esta acción nos ha unido en un objetivo común; la cohesión social, sobre todo después de la pandemia, se ha fortalecido, y es un testimonio de poder transformar la acción colectiva”, afirmó.
Los resultados no solo se reflejan en mejoras medioambientales significativas, sino que inspiran a la comunidad a ser agentes de cambio para construir un futuro más sostenible, con un entorno más verde y próspero.
“Cada pequeña acción cuenta, cada vez que apagamos las luces innecesarias o reducimos el consumo de plásticos de un solo uso, estamos contribuyendo a un mundo mejor”, indicó.
