Sabinenses hacen realidad el sueño de la quinceañera Perla Yadira
Protección Civil informó que más de tres mil personas asistieron al magno evento
SABINAS, COAH.- La fiesta de quince años de Perla Yadira fue el motivo perfecto para demostrar que la gente de Sabinas se puede unir y decirle a una adolescente que va descubriendo el mundo que la generosidad es posible.
“No imaginé que fuera a venir tanta gente; gracias, a todos”, dijo Perla Duarte Ramírez, hija de un vendedor de yukis muy conocido en el centro de la ciudad, para iniciar la celebración anoche a las 21:00 horas ante cientos de personas que vinieron incluso de otros municipios como Monclova, Piedras Negras, Múzquiz, Nueva Rosita, entre otros.
PASEO EN TRICICLO
El viernes Perla y su papá salieron a pasear por el centro en el triciclo que su padre usa para vender yukis, para conmemorar los 15 años que Perla cumplió el miércoles 2 de octubre.
La imagen del triciclo decorado de rosa, con “El Tarzán” pedaleando y su hija con un vestido se volvió viral y despertó la solidaridad de la sociedad de Sabinas y otros municipios.
En redes sociales se compartió más de mil veces la fotografía de la joven con su padre, por lo que usuarios buscaban a Perla para cooperar con algún obsequio para sus quince años.
Muchos ciudadanos apoyaron y consiguieron el salón, la música, la comida, el show para hacer de esta fiesta un fenómeno de solidaridad, diversión y baile en una ciudad con menos de 70 mil habitantes en la región Carbonífera.
Protección Civil señaló que más de 3 mil personas acudieron al evento.
CUMPLEN SUEÑO
En 2010 el río se desbordó: también ese año la comunidad se unió ante la tragedia. Pero desde el pasado y con el río seco, los ciudadanos se volvieron a juntar para cumplir el sueño de una adolescente y sus papás: sonreír y decir sí a la vida, en medio de un festejo, de una noche calientita de otoño, bajo un cielo limpio, oscuro, coahuilense.
Anoche Perla Yadira no dejó de sonreír: cientos de desconocidos se acercaban para felicitarla, ella respondía: gracias y un abrazo. La gente no dejó de llegar hasta las 2:00 de la madrugada.
El festejo continuó en la casa de los padres de Perla, Juan Manuel y Elsa Raquel Ramírez. Hoy esperan en su casa a todos los vecinos y desconocidos generosos para desayunar menudo.
