Comerciantes y restauranteros de Saltillo reportan poco ausentismo de trabajadores

Las bajas temperaturas registradas en Saltillo afectaron significativamente la movilidad y las actividades comerciales en el centro de la ciudad. Debido al congelamiento de vialidades, el transporte urbano se vio comprometido, lo que llevó a los comerciantes a implementar medidas para garantizar que sus trabajadores pudieran llegar y regresar de manera segura a sus lugares de trabajo.

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Christian Duarte Carreón, integrante de los comités de comerciantes del centro, explicó que las ventas se desplomaron de manera considerable a pesar de que los trabajadores lograron presentarse a laborar.

“Nos afecta mucho porque vivimos de la afluencia diaria de la gente que transita por las calles. Sin embargo, estas situaciones también generan oportunidades para otros sectores, como las cafeterías, tiendas de ropa de invierno y los servicios de entregas a domicilio”, comentó Duarte Carreón.

ESTRATEGIAS PARA GARANTIZAR LA SEGURIDAD DE LOS TRABAJADORES

Ante las complicaciones en el transporte público, los comerciantes ajustaron horarios y ofrecieron bonos a sus empleados para facilitar su movilidad. Duarte señaló: “Estamos haciendo todo lo posible para garantizar que los trabajadores lleguen y regresen a casa de manera segura. Hay dificultades con los taxis y el transporte público, pero buscamos adaptarnos a estas condiciones”.

RESTAURANTEROS MANTIENEN OPERATIVIDAD A PESAR DE LAS ADVERSIDADES

Por su parte, Isidoro García, representante de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC) en Coahuila, informó que el sector restaurantero no registró un ausentismo significativo.

“No tuvimos una gran cantidad de ausencias; apenas alcanzaron el 10%. Afortunadamente, los puentes se congelaron más tarde que los horarios de desayunos, lo que permitió mantener la productividad”, indicó García.

FUERTE CAÍDA EN LAS VENTAS

Sin embargo, el impacto más grave se reflejó en las ventas. Las bajas temperaturas llevaron a que muchas personas optaran por permanecer en casa, lo que ocasionó una disminución drástica en la actividad comercial.

“Hubo una baja en ventas de entre 50% y 70%, dependiendo del establecimiento. La ciudad estuvo prácticamente vacía, salvo en los grandes centros de trabajo”, detalló García.

A pesar de los esfuerzos por mantener operativa la actividad comercial y laboral, las condiciones climáticas adversas han dejado un panorama difícil para los comerciantes y trabajadores de Saltillo.