Con 88 campanadas, Saltillo despide al Papa Francisco

Este lunes 21 de abril, tras el lamentable fallecimiento del Papa Francisco, la Diócesis de Saltillo se unió al duelo mundial con una serie de actos litúrgicos y simbólicos en su honor. La Catedral de Saltillo se vistió de luto, y la comunidad católica local comenzó el novenario en memoria del máximo representante de la fe católica.

En la entrada principal del atrio, se colocó un moño negro, como símbolo de respeto y luto. Además, al término de la misa, se realizaron 88 campanadas, una por cada año de vida del Papa Francisco, como un gesto solemne para rendir homenaje a su legado.

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El Vicario General de la Diócesis de Saltillo, Manuel Fernando Pachicano, informó que el novenario se llevará a cabo durante los próximos días en la catedral. Sin embargo, señaló que aún no se ha recibido respuesta de otras parroquias que podrían unirse a esta iniciativa.

En su mensaje, Pachicano también se refirió a las posibles inclinaciones extremistas de los candidatos a suceder al Papa Francisco, pero dejó claro que, independientemente de sus preferencias personales, Dios siempre elige al Papa que la Iglesia necesita en cada momento. “Pues mire, en lo de los gustos y las inclinaciones, pues salen sobrando; siempre Dios nos da el Papa que necesitamos”, destacó.

El Papa Francisco será velado en la Casa de Santa Marta, el mismo lugar que él mismo eligió como residencia, siguiendo sus principios de simplicidad y humildad. De acuerdo con lo autorizado por el propio pontífice, el velatorio será sencillo y menos ostentoso, en línea con los valores que predicó a lo largo de su pontificado.

“El Papa Francisco, con su sencillez y humildad, le dio un toque especial a la Iglesia que no debemos olvidar nunca”, aseguró Pachicano, reflejando el sentimiento de respeto y admiración que dejó el Papa Francisco en la comunidad católica de Saltillo y en el mundo entero.

La noticia de su fallecimiento ha conmovido profundamente a millones de personas, quienes ahora se preparan para despedirlo con una oración conjunta, recordando su mensaje de paz, amor y solidaridad con los más necesitados.