El Obispo de Saltillo llama a la reflexión y a la búsqueda de fe durante la misa dominical
Durante la misa dominical, el obispo de Saltillo, Hilario González, hizo un llamado a los fieles a reflexionar sobre sus vidas y su relación con Jesús. Inspirado en la historia bíblica de Bartimeo, el ciego que clama a Jesús en busca de ayuda, el obispo instó a la comunidad a reconocer sus propias cegueras, tanto físicas como espirituales, y a buscar en la fe la fuerza para levantarse y continuar.
“Algunos estamos ciegos, necesitados, al margen del camino, algunos pasamos por momentos difíciles y le gritamos a Dios: Señor, ten compasión de mí”, expresó el Obispo.
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Invitó a los presentes a levantarse y enfrentar las dificultades con confianza en Jesús, recordándoles la importancia de pedir dones que les permitan vivir mejor y ser mejores discípulos.
VISITAS PASTORALES
El obispo también compartió detalles de su recorrido pastoral por las parroquias y rectorías del centro de la ciudad, particularmente en la Vicaría del Santo Cristo. Estas visitas buscan conectar con la comunidad tanto dentro como fuera de la iglesia. En sus paradas, ha visitado mercados, hospitales, la central de autobuses y casas de enfermos, donde ha ofrecido bendiciones y mensajes de fe a los feligreses.
“Una visita pastoral significa hacia adentro de la iglesia, conocer los grupos, los movimientos, las acciones que se hacen, pero también hacia afuera de la iglesia, lo que está alrededor”, explicó. Su recorrido, que abarca parroquias y vicarías como La Luz, San Francisco, Catedral y San Esteban, continuará en el centro y la salida a Torreón hasta concluir alrededor de la Semana Santa del próximo año.
En estas visitas, el obispo ha podido observar la gran necesidad de las personas de sentirse bendecidas y de contar con el apoyo de Dios en sus vidas. “La gente quiere sentirse bendecida, quiere que le vaya bien”, afirmó.
Señaló que entre las principales peticiones de los fieles están la salud, la unidad familiar, el crecimiento integral de los hijos y la estabilidad laboral y económica. También destacó la devoción popular a San Judas Tadeo, especialmente en situaciones difíciles y en la búsqueda de empleo.
El obispo reconoció que estas peticiones reflejan el anhelo de la comunidad de vivir en armonía y bienestar, y alentó a los fieles a seguir pidiendo no solo por ayuda material, sino también por dones que les permitan hacer el bien a los demás.
