Topes en ‘Los Chorros’ causaron embotellamientos: Secretario de Gobierno de Coahuila
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La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) implementó una serie de medidas en el tramo “Los Chorros” de la carretera 57, considerado uno de los más peligrosos de la entidad, con el fin de reducir accidentes. Sin embargo, la instalación de reductores de velocidad —topes— en dicho tramo ha generado un fuerte malestar entre transportistas y automovilistas debido a las largas filas que se formaron, provocando un embotellamiento que llegó a extenderse hasta 20 kilómetros.
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El secretario de Gobierno de Coahuila, Óscar Pimentel González, señaló que las medidas implementadas, aunque han sido efectivas en la reducción de accidentes graves, también han ocasionado problemas colaterales que deben revisarse. “En el tema de ‘Los Chorros’ estamos muy coordinados con la Guardia Nacional; la Secretaría de Seguridad Pública, por parte del gobierno del estado, tiene la responsabilidad de establecer ahí un operativo conjuntamente con el gobierno municipal y asegurar que no tengamos tantos problemas como los que hemos tenido, lamentablemente, por accidentes debidos a la alta velocidad que adoptan los conductores”, declaró Pimentel.
Las críticas hacia los topes se intensificaron luego de que el alcalde de Arteaga advirtiera que, si bien buscan reducir accidentes, los reductores pueden aumentar el riesgo de colisiones por alcance entre vehículos, ya que los conductores que viajan a alta velocidad podrían impactar con aquellos que frenan repentinamente al enfrentar los topes.
A pesar de estas preocupaciones, la SICT defendió su implementación inicial, argumentando que desde la instalación de los reductores de velocidad no se han registrado accidentes fatales en el tramo de “Los Chorros”, que anteriormente tenía un historial preocupante de siniestros viales.
ANALIZAN ALTERNATIVAS
Pimentel González admitió que, aunque las medidas han logrado reducir el número de accidentes, los embotellamientos generados por los topes son un problema serio que debe resolverse. “Lamentablemente ha funcionado, pero a la vez no. Nos ha generado mucho problema de aglomeración y de embotellamientos, y es un tema que tenemos que revisar con Capufe para ver de qué manera, sin obstaculizar el tránsito, podamos disminuir la probabilidad de riesgos. Sin topes, porque hemos tenido hasta filas de 10 kilómetros ahí. Es un tema que tenemos que analizar y valorar cuáles son las mejores opciones”, agregó el secretario de Gobierno.
Ante esta situación, la SICT anunció modificaciones en el tramo, reemplazando los topes por rayas logarítmicas alzadas, una alternativa que busca disminuir la velocidad de los vehículos sin causar tantos embotellamientos. Estas rayas generan una ilusión óptica y auditiva que induce a los conductores a reducir la velocidad, sin la necesidad de frenar bruscamente, lo que podría ayudar a mejorar el flujo vehicular en la zona.
Además de esta medida, se reforzó la vigilancia permanente en el tramo, con la participación de la Guardia Nacional, y se implementó un operativo de control de peso y dimensiones en kilómetros anteriores para evitar el paso de vehículos pesados con sobrepeso que podrían incrementar el riesgo de accidentes.
La SICT también realizó otras mejoras en el tramo, como el mantenimiento de la rampa de frenado de emergencia y la instalación de superficies de alta fricción en puntos críticos, con el objetivo de prevenir accidentes y mejorar la seguridad vial.
Finalmente, las autoridades exhortaron a los conductores, especialmente a los de vehículos de carga pesada, a respetar los límites de velocidad, conducir con precaución y revisar el estado de sus vehículos antes de salir a carretera, pues la principal causa de accidentes en la zona sigue siendo el exceso de velocidad y el estado físico de los conductores.