Da Derechos Humanos jalón de orejas a policías de Torreón
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En los mismos actos, el primer denunciante dio a conocer a la Comisión, que los elementos robaron de su domicilio y el del otro denunciante, una serie de pertenencias entre las que se encontraban dos armas que cuentan con licencia particular
La Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Coahuila, emitió su recomendación 13/2020 contra elementos del Grupo de Operaciones Especiales de la Fiscalía General del Estado, por haber ingresado ilegalmente al domicilio de dos hombres a quienes torturaron y amenazaron para que firmaran su responsabilidad en un delito de posesión de narcóticos.
Los hechos registrados en Torreón, fueron investigados a partir de entrevistas con los quejosos, además de los hallazgos e irregularidades encontradas en la información aportada por los policías y la corporación de la investigación.
En los detalles, uno de los quejosos expuso cómo fue la mecánica en la cuál un grupo de al menos 20 hombres cerró la calle de su domicilio e ingresó a su vivienda, golpeándolo a él y a sus hijos quienes se encontraban en las habitaciones por ser acusados de portación de armas y de narcóticos.
“Los agentes se dirigieron a mi cuarto y uno de ellos me encañonó con un arma larga y me dijo que me iba a matar, y entonces me tumbaron de la cama, me esposaron y me empezaron a patear en todo el cuerpo, me pusieron una bolsa en la cara para que se dificultara la respiración”, expresó.
En la queja, el denunciante también dio detalles sobre cómo junto con su hijo y otro hombre quien también presentó una denuncia por el allanamiento, fueron trasladados a las oficinas del Ministerio Público para hacerles firmar una hoja por la fuerza.
“Nos sacaron a mí y a mi hijo AG2, siendo trasladados a un domicilio, en donde saquearon un domicilio de un joven y una mujer embarazada, a quien amenazaron con violar”, expresó el quejoso.
En los mismos actos, el primer denunciante dio a conocer a la Comisión, que los elementos robaron de su domicilio y el del otro denunciante, una serie de pertenencias entre las que se encontraban dos armas que cuentan con licencia particular vigente por parte de la Sedena, de la cual presentó pruebas, misma que usa en su tarea de trailero que también fue acreditada.
La recomendación acreditó que hubo violaciones tales como allanamiento de morada, ejercicio indebido de la función pública, lesiones y retención ilegal, y no se pronunció sobre los actos de tortura. En el documento se pidió investigar e imponer responsabilidades, así como reponer los daños causados.
