Extenderá BordArte sus operaciones: Bordan el éxito a su empresa

Hoy, 14 años después, aquel pequeño taller ha sido convertido en una importante compañía, de calidad y reconocimiento internacional, que sigue dando servicio para el segmento que fue creada, pero que encontró en la industria automotriz su principal nicho de mercado, bordando el nombre de muy diversos modelos en asientos y vestiduras de automóviles y camionetas de las más prestigiadas marcas.

Es así como BordArte `borda el nombre de Saltillo' en vehículos de Chrysler, General Motors, Ford, Toyota y Nissan, con grabados de gran calidad en piel y en diversos materiales sintéticos, que le han valido la preferencia de las armadoras, que ahora están requiriendo su presencia en Estados Unidos.

Como parte de una bien planeada estrategia de crecimiento, la empresa ha decidido instalar un nuevo eslabón de la empresa en El Paso, Texas, que iniciará con un proceso de capacitación por parte de sus técnicos saltillenses, especialistas que han alcanzado un alto nivel en un trabajo que combina la alta tecnología con un toque final de artesanía.

Pero la fundadora de la empresa ya no está sola, primero logró entusiasmar a su esposo, Pedro Quintanilla Rodríguez, quien se integró de tiempo completo al proyecto, y con el paso de los años y después de concluir sus estudios, se fueron integrando sus hijos Pedro, Bernardo y Gabriela, y juntos le han inyectado la sinergia, talento y dinamismo que hoy caracteriza a BordArte.

Pedro Quintanilla Rodríguez, director general, detalla que actualmente para Chrysler están bordando para las camionetas Ram, Jeep y Minivan, asi como para versiones especiales como Daytona; mientras que para GM hacen lo propio para el Chevy, la Hummer H3, y la Cadillac Escalade. Para Ford elaboran grabados para la Pick Up Sport y la Lincoln Navigator. También bordan para los modelos Celtica y el SP de Toyota, y otros de Nissan.

"Desde que me integré en 1994, empezamos a visualizar el potencial que se podía alcanzar a través de producir en grandes volúmenes, pero había que proyectar el negocio hacia la industria, sacrificando las pequeñas utilidades en inversión en el equipo que nos permitiera llegar a un nivel de calidad para acceder a mejores mercados", explica.

"Fue así como empezamos a tocar puertas -relata el entrevistado- y había que ir hasta Detroit, a ofrecer nuestro trabajo ante los directivos de Chrysler, y nos costó cinco años insistiendo, para convencerlos que podíamos darles el servicio que ellos necesitaban, y al ritmo que exigen las grandes armadoras dados sus procesos de producción".

"Finalmente, en 1999 logramos el primer pedido, un bordado para la camioneta Ram que armaba Chrysler en San Luis Missouri, y desde entonces no hemos parado, es un pedido tras otro, un proyecto tras otro, y ahí vamos pegados de este proceso de crecimiento del sector automotriz, el cual está avanzado pues ya estamos trabajando en los modelos 2009 y 2010".

También Bord Arte fabrica y distribuye los artículos promocionales de Chrysler a todas las distribuidoras nacionales: cachuchas, chalecos, playeras, llaveros, automóviles a escala, llaveros, llaveros, porta-vasos, y un sinfín de productos, "el 40 por ciento los producimos, el otro 60 lo importamos, pero lo rotulamos y bordamos".