¿El oro es extraterrestre?... el increíble origen de uno de los metales más valiosos de la Tierra

Desde la antigüedad, el oro ha fascinado a la humanidad por su rareza, belleza y resistencia a la corrosión. Pero más allá de su valor económico, este metal encierra un misterio científico que ha captado la atención de astrónomos y geólogos: su posible origen extraterrestre.

Estudios recientes indican que el oro no se formó en la Tierra, sino en eventos astronómicos extremos ocurridos hace miles de millones de años, mucho antes de la formación de nuestro planeta.

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COLISIONES DE ESTRELLAS DE NEUTRONES: FÁBRICAS CELESTIALES DE METALES PESADOS

La teoría más aceptada actualmente es que el oro se originó durante la colisión de estrellas de neutrones, uno de los eventos más violentos del universo. Cuando estas estrellas extremadamente densas chocan, liberan enormes cantidades de energía y materia, incluyendo elementos pesados como el oro y el platino.

En 2017, un equipo internacional de astrónomos observó por primera vez una colisión de este tipo mediante ondas gravitacionales y luz visible. El evento confirmó que tales colisiones producen grandes cantidades de oro, estimadas en varias veces la masa de la Tierra.

Dato curioso: Se calcula que una sola colisión de estrellas de neutrones puede generar hasta 10 veces la masa de la Luna en oro puro.

CÓMO LLEGÓ A LA TIERRA: UNA LLUVIA DE METEORITOS

Si el oro se formó en el espacio, ¿de qué manera llegó a nuestro planeta? Los científicos creen que, durante el bombardeo intenso de meteoritos que ocurrió hace unos 4 mil millones de años, estos fragmentos espaciales depositaron metales preciosos como oro, platino y paladio en la corteza terrestre.

La mayor parte del oro original de la Tierra quedó atrapado en el núcleo durante su formación. El que hoy encontramos en minas proviene de esos impactos posteriores que lo distribuyeron en la superficie y el manto.

Dato curioso: Se estima que el 99% del oro terrestre se encuentra inalcanzable en el núcleo, a más de 3,000 kilómetros de profundidad.

UNA MIRADA AL CIELO PARA ENTENDER EL SUELO

La investigación sobre el origen estelar del oro no solo amplía nuestro conocimiento sobre los procesos del universo, sino que también revaloriza este metal como un legado cósmico. Cada joya de oro que usamos podría contener átomos forjados en una explosiva danza de estrellas hace eones.

Esta perspectiva también ha abierto nuevas líneas de estudio en la minería espacial, donde asteroides ricos en metales preciosos podrían convertirse en las futuras minas del siglo XXI.

Dato curioso: La NASA ya ha identificado un asteroide llamado 16 Psyche que podría contener suficiente oro y metales como para valer más que toda la economía mundial.

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ORO: MÁS QUE UN METAL, UN MENSAJE DEL UNIVERSO

La próxima vez que sostengas una pieza de oro, recuerda que no solo tienes entre tus manos un metal valioso, sino también una partícula del cosmos. Su historia comienza en las profundidades del espacio, donde la gravedad y la energía crearon los elementos que hoy forman parte de nuestra vida cotidiana.

El oro, al igual que nosotros, es polvo de estrellas.