Desaparecen 14 menores de edad en México al día
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En la mayoría de casos los padres son los responsables
CDMX.- Senadores y activistas alertaron que en México son sustraídos ilegalmente o secuestrados cerca de 14 menores de edad y en el 60 por ciento de los casos los implicados son los padres o exparejas.
En este sentido los legisladores consideraron que es necesario fortalecer el marco legal para sancionar este tipo de delitos y agilizar los mecanismos de búsqueda como la Alerta Amber.
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Dania Michelle Casillas Zea, mencionó que su expareja Germán “N” sustrajo ilegalmente a sus hijas Leonora y Amelia, a quienes escondió con el apoyo de familiares; a través de fallos del Tribunal de Justicia de la Ciudad de México y la intervención de la fiscalía capitalina y la Secretaría de Seguridad Pública, pudo recuperarlas.
“Para mí fue una pesadilla. Todos los días que yo las buscaba, que iba a la casa de sus abuelos en las noches a gritarles para que las pudieran asomar, los vecinos llamaban a la patrulla, me corrían, me decían que me fuera a mi casa, que ellas estaban bien, y yo lo único que les decía: no van a estar bien hasta que yo las vea. Yo sé la calidad de persona que es con la que están”, detalló.
“Lo que fue capaz de hacerme a mí, que no haga a sus propias hijas. No es algo que pasa cuando se las llevan. Esto venía siendo desde años antes, pero nos da miedo, nos sentimos solas, la dependencia económica, la dependencia emocional, el miedo que nos causan estas personas”, mencionó durante una conferencia en el Senado.
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“Todas las veces que nosotras queremos huir de ahí escuchamos el: “si te vas te voy a quitar a los niños”, ¿no? Y ese es nuestro mayor miedo que enfrentamos cuando decidimos romper con esta violencia que viene de años, o de una historia atrás. Para mí fue un milagro poder volver a ver a mis hijas”, añadió.
Durante la conferencia el abogado Pablo Huerta reiteró que el acceso a la justicia no debe condicionarse a la capacidad económica que tienen las personas afectadas y que los litigantes deben realizar un ejercicio ético de la profesión, sin lucrar con este tipo de situaciones.