Representa Obama solapamiento de culturas
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El guionista y director mexicano Guillermo Arriaga afirmó hoy que, más que vivirse actualmente el momento de los hispanos en Estados Unidos, 'estamos asistiendo al reconocimiento del solapamiento de las culturas' y Barack Obama es una muestra de ello.
'Si es elegido presidente será la confirmación oficial y política de esa realidad', expuso Arriaga en una entrevista publicada este jueves por el periódico español El Mundo.
A partir de ahí, añadió, 'creo que empezará a cuestionarse el concepto de nación, un concepto por otra parte muy joven y que se está revisando'.
'¿Qué define a una nación? ¿la raza, el idioma, la frontera, la cultura? Todo esto esta en revisión', acotó Arriaga, quien participa en la Mostra de Venecia con 'The burning plain', su primera película como director.
Consideró que Estados Unidos es un país del que se tiende a simplificar mucho al hablar de él.
'Y un país que tiene a Faulkner, a Scorsese, a Coppola, a Steinbeck, a Hemingway o a Edward Hopper no puede ser simple, no puede', dijo, y agregó que tampoco se puede simplificar al presidente de Estados Unidos, George W. Bush.
'Creo que Estados Unidos es un país partido a la mitad; tiene una parte completamente liberal, que empuja a la aceptación de los demás y que representa un amplio sector de Hollywood, y otra cerrada y conservadora', expuso.
Por otra parte, el guionista de filmes como 'Amores perros', '21 gramos' y 'Babel', aseguró que México ofrece una visión más cruda de la humanidad, más fuerte, más contradictoria, y agregó que las ciudades latinoamericanas comparten esas fuertes contradicciones.
'En Estados Unidos también existen, pero hay un grupo de cineastas estadunidenses de la clase media y medio-alta que nunca han experimentado la humanidad de manera profunda y que hacen películas que están muy vinculadas al cómic', acotó.
Subrayó que en cambio 'nosotros, en México, para ver la violencia sólo tenemos que abrir la puerta de casa'.
Arriaga se refirió en la entrevista a las diferencias que ha tenido con el cineasta mexicano Alejandro González Iñárritu, porque, explicó, no se cumplieron algunos 'pactos de caballero'.
'Yo pretendía dirigir `Amores perros', pero (Iñárritu) me pidió que lo dejara hacerlo a él. Yo le dije que sí, pero que como pago, me tenía que dejar participar activamente en la película y que debía figurar que era una película de los dos', expuso.
'Así como sucede en las películas de los hermanos Cohen, tenía que decir que era una película de Iñárritu y Arriaga, pero el acuerdo no se respetó', añadió.
A pregunta expresa de por qué continuó en los proyectos de '21 gramos' y 'Babel' con Iñárritu, respondió que 'porque los niños nos salían bonitos'.