Kim Jong-un envía tropas norcoreanas a luchar en Ucrania: ¿Qué significa esto para la guerra?

Si bien, aún no se sabe bien a bien cuántos soldados norcoreanos arribarán a los “campos de exterminio del este de Ucrania”, precisa Ra Mason, quien es profesor de Relaciones Internacionales y Política Exterior Japonesa en la Universidad de East Anglia, en su artículo “Kim Jong-un sends North Korean troops to fight in Ukraine – here’s what this means for the war” publicado en The Conversation.

Lo que sí se tiene claro, prosigue Mason, es que la intensión de reclutar fuerzas de combate de Norcoreanas “tiene, al menos en parte, motivaciones políticas. Pero ¿es también una jugada maestra táctica que aumentará las posibilidades de la máquina de guerra rusa de lograr una victoria definitiva?”.

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Así mismo, en lo que se refiere al interés político este si parece estar claro; ya que “el uso de fuerzas extranjeras de un enemigo de los Estados Unidos”, añade Mason, es una muestra que evidencia la “oposición al orden global liderado por Washington”, y al mismo tiempo, También es un “golpe al mito de que la Federación Rusa está aislada, como un paria internacional, en un mundo liderado por potencias occidentales”.

En opinión del profesor de Relaciones Internacionales y Política Exterior Japonesa en la Universidad de East Anglia, no obstante al incremento del número de tropas, además “existen múltiples problemas con la incorporación de estos posibles mercenarios del lejano oriente a las fuerzas de Putin en la línea del frente en Europa”. Por otra parte, Corea del Norte está empobrecida y autoritaria. lo que significa “que su personal está en su mayoría mal equipado, desmotivado y desnutrido. Por lo tanto, probablemente será decisivo dónde y cómo se los despliegue”, agrega Mason

De darse la situación de que “se enviara a nuevos teatros de operaciones contra el armamento de última generación suministrado por la OTAN”, esto podría derivar podría “en la práctica oleadas de carne de cañón mal preparada que serían arrojadas a la picadora de carne de las trincheras del Donbass”. En donde la mayoría de estas “seguramente” perderían la vida como consecuencia “de los drones FPV (vista en primera persona) o del fuego de los tanques occidentales”, explica Mason.

LAS DESERCIONES SUPONDRÍAN UN RIESGO

Mason considera que si se les ordena alas tropas norcoreanas en el campo de batalla “fuera del control inmediato”, se podría dar la situación “sin duda” como la oportunidad de que pidieran “escapar de la opresión y la pobreza” en su país.

Así también, las deserciones “en masa hacia el lado ucraniano” se podría convertir en una posibilidad para los soldados. Sobre todo, “si las fuerzas especiales ucranianas u otras fuerzas especiales en el terreno las identifican y les indican cómo rendirse”, detalla Mason.

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Teniendo en cuenta estos posibles escenarios, “aparentemente obvios”, precisa Mason, por lo que, prosigue “sería fácil suponer que la exhibición deliberada de campos de entrenamiento en el este de Rusia para soldados norcoreanos es poco más que un truco político, diseñado para infundir miedo en un ejército ucraniano que ya está en dificultades y para fastidiar a sus partidarios occidentales. Al mismo tiempo, puede haber motivos para pensar que esta medida tiene algo más que pura política”.

RESPUESTA DE OCCIDENTE

No obstante que existe una diferencia entre el que Corea del Norte suministre proyectiles de artillería para los cañones rusos a enviar tropas a pelear a territorio ucraniano “es clara”.

Esto no necesariamente quiere decir que no exista “un valor táctico en el despliegue de fuerzas coreanas en el campo de batalla”. Para Mason “la clave probablemente resida en dónde y cómo se las despliega. Imágenes satelitales tomadas por la televisión surcoreana que muestran múltiples imágenes que se cree que son de tropas norcoreanas en Rusia”.

Al mismo tiempo no hay que perder de visa “la cuestión inmediata del derecho internacional”. Así como cuál podría ser la respuesta de los países que conforman la OTAN “a nuevas violaciones de las reglas de combate establecidas por parte de fuerzas extranjeras dirigidas por Rusia”, indica Mason, por lo que “sin duda, el uso de mercenarios coreanos para luchar en la región del Donbas, que es reconocida por los aliados occidentales como territorio ucraniano, constituiría una grave violación”, afirma el profesor de Relaciones Internacionales y Política Exterior Japonesa en la Universidad de East Anglia.

Siendo así que en opinión de Mason, la respuesta por la OTAN es posible que sea “rápida y definitiva”, debido a que se “justificaría efectivamente el uso proporcionado de la fuerza, incluido personal extranjero, para contrarrestar cualquier avance ruso posterior”.

De llagarse a dar esta situación, sería un u duro golpe para Putin; debido a que “cualquier ventaja inicial obtenida se perdería rápidamente a medida que los amigos de Ucrania entraran justificadamente en la contienda para hacer retroceder una alianza ilegal de agresión entre Moscú y Pyongyang. La escalada a partir de entonces también sería una preocupación seria y grave”, explica el profesor de Relaciones Internacionales y Política Exterior Japonesa en la Universidad de East Anglia.

Por otro lado, Mason precisa que si se “despliegan en una combinación de funciones técnicas y logísticas, o principalmente para defender el territorio ruso”, el uso “de la mano de obra adicional se vuelve más creíble”.

Por último, Mason detalla que tomando en cuenta lo concerniente a la “perpecpectiva jurídica internacional” entonces podría considerarse “legítimo” que Rusia busque la ayuda por parte de sus aliados con el objetivo de “repeler la incursión de Ucrania en la región de Kursk, en el sudoeste de Rusia”.

“Esto podría suponer un doble golpe para Kiev. Por un lado, probablemente proporcionaría personal suficiente para acabar rápidamente con las ya de por sí debilitadas fuerzas ucranianas que se aferran al territorio ruso soberano capturado. Al mismo tiempo, la propia maquinaria militar de Moscú podría centrar toda su atención en los avances ya crecientes que se están realizando a lo largo del frente del Donbas”, explica Mason.

¿TIENE INFLUENCIA COREA DEL NORTE EN EL ESCENARIO INTERNACIONAL?

De acuerdo con Mason, la “influencia” de Norcorea “en el escenario internacional” se incrementó desde que momenzó la guerra en Ucrania, esto gracias a sus grandes reservas de municiones que resultaron esenciales “en las tácticas de desgaste de Rusia”. Por lo que, la incorporación de tropas extranjeros al conflicto militar puede sumar “un factor más a favor de Moscú si se los despliega y dirige con habilidad”.

En última instancia, precisa el profesor de Relaciones Internacionales y Política Exterior Japonesa en la Universidad de East Anglia, “es poco probable que el envío limitado de tropas coreanas inexpertas a una zona de guerra a la que no tienen base legal ni moral para ser enviadas resulte decisivo”.

“Tal como están las cosas, con o sin la ayuda de las fuerzas suministradas por el despótico líder de Corea del Norte, Kim Jong-Un, el brutal avance militar de Rusia parece destinado a continuar”, añade,

“En este sentido, la llegada de norcoreanos a la peor guerra de Europa en una generación es probablemente poco más que otro episodio extraño en este cruel conflicto. La verdadera preocupación es cómo se pueden transformar estados autoritarios como Rusia y Corea del Norte en algo parecido a sociedades civilizadas que podrían seguir caminos de política exterior más positivos”, concluye Mason.