Maduro moviliza ejército por escalada de crisis

Internacional
/ 15 mayo 2016

Ayer anunció su decisión de iniciar ejercicios militares de la Fuerza Armada para prepararse para “cualquier escenario”

CARACAS.- Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, ha dirigido toda su artillería para ahogar a la oposición. Decretó el viernes un Estado de Excepción y Emergencia Económica que suspende garantías constitucionales ante la posibilidad de un “golpe” contra su Gobierno.

“He decidido aprobar un nuevo decreto que me dé el poder suficiente para derrocar el golpe de Estado, la guerra económica, para estabilizar socialmente nuestro país y para enfrentar todas las amenazas que hay”, dijo.

Ayer anunció su decisión de iniciar ejercicios militares de la Fuerza Armada para prepararse para “cualquier escenario”, tras informar de unos supuestos planes de intervención extranjeros.

“No saben lo que somos capaces de hacer. Vamos a defender a Venezuela con la Constitución Nacional y con los fusiles también”, agregó el presidente. “He convocado a ejercicios militares nacionales de la Fuerza Armada, del pueblo, y de la milicias, para prepararnos frente a cualquier escenario, porque esta tierra es sagrada y debemos hacerla respetar”, ha asegurado el jefe de Estado.

AÚN ES TODO INCIERTO

El alcance del Estado de Excepción es de momento incierto. Maduro no ha detallado cómo aplicará este nuevo “estado de excepción” que, según la oposición, podría restringir las álgidas protestas callejeras.

Jesús Torrealba, secretario de Mesa de la Unidad Democrática, ha calificado la medida como un “autogolpe” . “Esto es, técnicamente, un ‘autogolpe’ porque ha ignorado al Parlamento.

Para que este decreto tenga validez ha debido ser discutido antes por la Asamblea Nacional de Venezuela y eso no se hizo”, dijo en una concentración hecha en Caracas para pedir al Consejo Nacional Electoral –controlado por el chavismo– que agilice los trámites para convocar este año a un referendo revocatorio contra el mandato del sucesor de Chávez. 

El dato
- Venezuela retiró a su embajador en Brasilia y lo llamó a Caracas, por lo que califica de “golpe” contra la mandataria Dilma Rousseff.

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