‘Un teatro. Un circo. Una burla’: así califican Madres Buscadoras la visita al Rancho Izaguirre, en Teuchitlán

El 20 de marzo la Fiscalía General del Estado (FGE) de Jalisco y la Fiscalía General de la República (FGR) autorizaron la entrada a personas al Rancho Izaguirre, un predio en el que se hallaron restos humanos calcinados y pertenencias personales.

Entre el público se encontraban colectivos de madres buscadoras, activistas y medios de comunicación. De esta forma, el caso pasó de ser algo atemorizante a ser “un teatro”, según acusaron familias de desaparecidos.

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“Esto parece más un tour de una película de de terror, porque en realidad esto es inimaginable, yo no sé cómo se atrevieron a traer a tantas familias a ver estas escenas que, de verdad, te dan terror”.

Por su parte, otras personas externaron sus inquietudes, como el caso de la madre buscadora Patricia Sotero, miembro del Colectivo Huellas de Amor, quien acusó a la FGE de ‘maquillar’ el escenario: el rancho fue “pintado, arreglado y barrido” por las autoridades ministeriales.

“Todo esto fue un circo, nos utilizaron a todos nosotros para tapar muchas cosas, yo siento que ellos ya tenían previsto todo esto. Ya tenían organizado su circo, ya tenían planeado citar a la prensa de todos los estados para tapar la realidad de que no hay hornos, ni fosas”, expresó Sotero.

‘MAQUILLARON’ EL RANCHO IZAGUIRRE

Medios de comunicación que tuvieron la oportunidad de documentar el suceso, indicaron que habían zonas acordonadas en el Rancho, lo que limitaba el acceso de las personas. Asimismo, habían varios letreros con la leyenda “Evidencia. No tocar”.

En un inicio, el colectivo Guerreros Buscadores reportaron el hallazgo de prendas de vestir, zapatos y objetos personales. Ahora, todo estaba ‘en orden’:

“Estaba todo totalmente limpio, parecía que fueron a barrer un terreno como para una fiesta, fueron a barrer y a limpiar, no se ve como la escena de hallazgo, se ve una escena para una fiesta”.

Madres buscadoras se dijeron decepcionadas al no poder ingresar a las zonas que querían: “Queríamos entrar a ver dónde estuvieron los muchachos, supuestamente donde los tuvieron privados de la libertad, pero todo está acordonado”.

MADRES BUSCADORAS ENTRARON POR LA FUERZA

Entre la desesperación y la búsqueda de respuestas, madres buscadoras reconocieron haber ‘roto’ el cerco policiaco que mantenía la Fiscalía de Jalisco, a un kilómetro del Rancho Izaguirre.

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“Ingresamos a la fuerza al lugar, nos tenían media hora arriba de los camiones deshidratándonos, media hora, parados afuera, venimos a ver qué se ha trabajado, qué es lo que hay avanzado”, dijo para medios Lily Meza, del grupo Luz de Esperanza.

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Con información de medios