No localiza la fiscalía el arma homicida
Aún faltan las pruebas las genéticas que permitan vincular ante un juez de la Ciudad de México la agresión sexual que presuntamente Mario cometió en contra de la pequeña Fátima
CDMX.- Gladis Giovana Cruz Hernández y Mario Alberto Reyes Nájera, la pareja acusada del rapto y asesinato de Fátima, continúan detenidos en el municipio de Atizapán, Estado de México, por el delito de cohecho.
Hasta el momento, la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México no ha obtenido las órdenes de aprehensión por el delito de secuestro con la finalidad de hacer daño.
Fuentes cercanas a la investigación revelaron que la demora de la fiscalía para proceder es que no han localizado el arma homicida -un supuesto cinturón- y tampoco se tienen las pruebas genéticas ni el ADN que los vinculen la agresión sexual que, presuntamente, Mario cometió.
No obstante, las autoridades de la Ciudad de México tienen la certeza de que en las próximas horas los imputados serán trasladados a la capital de la República, para presentarlos ante el juez que los requiere e iniciar el proceso legal en su contra, con base en el nuevo sistema judicial. De ser encontrados culpables, Gladis Giovana Cruz Hernández y Mario Alberto Reyes Nájera podrían alcanzar hasta 120 años de prisión.
El secretario de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch, detalló que el móvil en el caso del feminicidio de Fátima no fue el dinero y confió en que la Fiscalía General de Justicia local informará las intenciones que tenía el agresor.
“Nosotros, por respeto a Fátima, queremos ser muy cuidadosos en lo que decimos del móvil, porque fue un crimen atroz, un feminicidio, es una tragedia verdaderamente grave, no fue por dinero, de ahí a las intenciones que haya tenido este sujeto, en su momento la Fiscalía General de Justicia lo comentará. Lo que sí queremos es evitar una situación de morbo, fue un crimen terrible para la sociedad y estas personas ya están detenidas”, comentó García Harfuch.
El funcionario local explicó que la policía municipal de Isidro Fabela realizó la detención de la pareja y que los ahora imputados intentaron sobornarlos, lo que fue aprovechado para ponerlos a disposición por cohecho.