`No quiero alejarme de la ex novia de mi hijo, ella y yo nos hicimos muy buenas amigas.'

QUERIDA ANA:

El año pasado, mi hijo único, que tiene 19 años, comenzó a salir con una jovencita que va a la misma universidad que va mi hijo. Él al poco tiempo la llevó a la casa y ella y yo congeniamos mucho, a mi marido desde el principio le cayó muy bien la muchacha. En varias ocasiones los invitamos a mi hijo y a ella a cenar o a comer en restaurantes y ella y yo fuimos varias veces al teatro y al cine. Esta chica y yo compartíamos muchos intereses y nos hicimos buenas amigas.

Hace mes y medio mi hijo anunció que iba a terminar su noviazgo con ella porque su relación no iba a ninguna parte. Eso fue todo lo que nos dijo. A mí me causó tristeza pero acepté su decisión, aunque abogué un poco por ella para que no la dejara.

Ahora mi hijo quiere que deje de ver y de hablar con esa joven. Él ni siquiera le habla y me dijo que por favor ni mencionara el nombre de ella en su presencia.

¿Debo hacer caso a mi hijo? La muchachita disfruta mucho también mi compañía. Nuestra relación es como la de una madre y una hija y yo también estoy apesadumbrada de que ya no sean novios y ahora de que ni siquiera pueda hablar con ella. Mi hijo todavía no tiene otra novia.

Gracias por su consejo.

TRISTE
 
QUERIDA TRISTE:

Por la manera como está reaccionando su hijo porque usted continúa su amistad con esa joven, debe haber más en la historia del rompimiento de lo que él ha revelado a ustedes. Aunque usted anhele una hija, esa muchacha no lo es.

Le sugiero que permita que su relación con ella se enfríe poco a poco. Si no lo hace, la relación entre usted y su hijo va a sufrir. Piense nada más que los sentimientos de él deben tener prioridad.

ANA
 
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QUERIDA ANA:

Estoy casada, yo tengo 24 años y mi esposo tiene 28. Hace año y medio por pura casualidad descubrí que mi esposo estaba viéndose en secreto con una mujer que fue su novia antes de que él y yo fuéramos novios, y con la que casi se casó, pero tuvieron un problema que nunca he conocido y terminaron.

Cuando me enteré busqué al esposo de ella y estuvimos platicando, después él me llamó y me dijo que no le había dicho nada a su esposa (yo tampoco le dije nada a mi marido), luego volvimos a vernos. El caso es que comenzamos a vernos o a hablar por teléfono y ahora siento que me estoy enamorando de él.

Mi marido y esa mujer ya terminaron, hace algunas semanas que ya no se ven, nos hemos dado cuenta su esposo y yo pero él y yo seguimos hablando o viéndonos.

¿Debo dejar a mi esposo para que los otros se separen y nosotros podamos vivir juntos o sigo viviendo con mi esposo. Yo estoy tentada a dejarlo por lo que me hizo. Por favor ayúdeme.  Estoy en un

DILEMA

QUERIDA DILEMA:

Comprendo que quieras vengarte de tu esposo, pero tú tampoco te has comportado bien. Yo te digo que no es correcto lo que quieres hacer. La realidad es que ni tú ni el esposo de esa mujer están disponibles.

Te sugiero que antes de que tomes una decisión definitiva, pruebes a tomar terapia matrimonial para ver si puedes reconstruir una relación cariñosa y confiable con tu esposo. De esa manera nadie saldrá lastimado.

Te voy a contar algo que me contaron a mí: Una mujer fue a visitar a un médico amigo y le dijo: "Me quiero divorciar de mi marido". "¿Por qué?" -Preguntó él. Y ella le dijo: "Porque tiene otra". "Bueno -le dijo el amigo-, si quieres divorciarte, le haces un favor, mejor primero enamóralo y luego te divorcias de él". "¿Y cómo lo puedo hacer?"  -

Preguntó ella-. "Hazle tres elogios cada día: ¿Viste bien?, ¿Tiene buena presencia? ¿Es cumplidor? Díselo". La mujer se propuso hacerlo y al cabo de unos meses se encontró con el médico y éste de inmediato le preguntó por su esposo. "¡Lo logré! -Le dijo ella-.

Está más enamorado de mí que nunca". "Entonces ahora déjalo", le dijo el médico. Y la respuesta de ella fue la siguiente: "No, ahora no lo dejo porque yo también estoy más enamorada de él".

ANA