Matar al Presidente
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Dos constantes acompañaron al desarrollo de la política en el Siglo 20: la violencia y la corrupción; Desde la dictadura de Díaz, en la que el ejercicio de la represión fue la constante hasta el acomodo de las fuerzas revolucionarias en el gobierno triunfador, se pueden observar ambos fenómenos.
La estadística del crimen magnánimo incluye a dos presidentes en funciones y a un candidato a la Presidencia, amén de algunos asesinatos que se sucedieron con el fin de abrir camino a otro aspirante a la primera magistratura.
De huida a Veracruz y en el pueblo de Tlaxcalantongo en 1920, Venustiano Carranza, presidente constitucional fue abatido por las balas de sus opositores y 8 años después el recién electo presidente Obregón fue asesinado en el famoso restaurant "La Bombilla", 66 años transcurrieron para que Colosio fuera fusilado por el sistema presidencial en Tijuana en 1994.
La cuenta de los homicidios a posibles "estorbos" para acceder al poder incluye a: los Generales Francisco Serrano y Arnulfo R. Gomez en Huitzilac a fin de eliminarlos de la contienda presidencial en la que participó Obregón. El envenenamiento de Maximino Avila Camacho que dejó camino libre a Miguel Alemán y el accidente que mató a Carlos Madrazo y dejó a Echeverría como único candidato.
Otros más suscitados contra verdaderas paredes en contra del sistema priísta se suman en las muertes de: Alfredo V. Bonfil quien era líder de la CNC, Manuel J. Clouthier para acallar a la oposición en contra de Salinas, Francisco Ruiz Massieu quien podría haber sustituido a Zedillo y José Angel Conchello, quien después de haber denunciado la desaparición de la isla Bermeja por parte de Zedillo, pereció en un extraño accidente.
El escenario actual de la violencia por ende, no es una invención del sexenio de Calderón, es más bien una hecatombe en contra de aquel que violó el sistema de hacer las cosas desde el Gobierno, establecido por sus antecesores.
La fórmula que operaba antaño era la del reparto de plazas y la utilización de los dineros de la corrupción, generada por el narcotráfico y el crimen común, en el aumento del pecunio de los gobernantes.
Basta analizar la historia del narcotráfico en México para darnos cuenta de la liga indisoluble entre productores-distribuidores y persecutores legales (llámese gobierno), desde el inicio de la segunda guerra mundial hasta estos tiempos.
Jean Giono escribió, refiriéndose al prologo del Príncipe de Maquiavelo (el libro de cabecera de Rubén Gobernador): "Siempre ha sido necesario asesinar. A partir de los tiempos de Maquiavelo, en quien no había ningún deseo de juzgar a nadie, el escritor (de quien sólo tres de sus 11 obras son políticas) siente la necesidad de privar al asesinato de toda ficción poética. La sociedad se ha vuelto más exigente. Ha sabido diferenciar entre el crimen inútil y el crimen necesario, y muy pocos de los que se cometen son inútiles. Dentro del crimen útil distingue entre el buen crimen y el crimen ordinario. Este último pasa desapercibido. Por sí solo, el buen crimen se propone a la admiración de las iglesias y el dulce obispo de Nocera, monseñor Paolo Giovio de Come, dirá con admiración que el asesinato es un `bellísimo engaño'".
La muerte del presidente Calderón será diferente, porque paradójicamente la estará viviendo en la campaña de Josefina, cuando decidió que era suficiente y por ende que debería preparar la entrega de estafeta al "copetón" mexiquense y a la mafia que lo acompaña, voto incauto de por medio.
Aislado, difuntos sus mejores amigos, sin más batallas que enfrentar, estará en la remembranza como cuando hace 13 años, puso pausa a lo vivido y se fue a buscar el camino a Itaca, despidiéndose de su mentor Castillo Peraza para siempre, entonando el viejo poema de Kayafis: "Si vas a emprender viaje hacia Itaca/ pide que tu camino sea largo, rico en experiencias, en conocimiento/Llegar allí es tu meta, más no apresures el viaje, mejor que se extienda largos años/ y en tu vejez arribes a la isla con cuanto hayas ganado en el camino, sin esperar que Itaca te enriquezca."
POLICIACAS.- Siguen graneando los amparos contra el decreto que aumentó impuestos aprobado por Hilda Flores Escalera, ahora fueron: Paden, Plastic Omnium, Metelmex, Modelo de Torreón, Gamesa, Inoplastic, Pisa (la que era del mismo Jorge Torres) y Alfino. Haya Cosa. En otro orden, al parecer no le concederán amparo a Juan M. Froto en su juicio en contra del Juzgado Primero Federal bajo el expediente 1265/2011, en el que se queja de espionaje del Gobierno Federal por su participación en el asunto de la mega deuda de Coahuila. SI VALE.