`El destino siempre pone pruebas, está en nosotros salir adelante.'

QUERIDA ANA:

Encontré este escrito y se me hizo hermoso. Lo comparto contigo por ser el mes de las madres, y si así lo consideras conveniente, lo compartas con tus lectores, que segura estoy quienes puedan estar pasando por una inexplicable tristeza, y en este momento les caería como un bálsamo a su corazón.
          
Un saludo.

UNA LECTORA VEN PARA ACA.

Ven para acá, me dijo dulcemente mi madre cierto día; (aún parece que escucho en el ambiente su voz la dulce melodía).

Ven, y dime qué causas tan extrañas te arrancan esa lágrima, hijo mío, que cuelga de tus trémulas pestañas. Como gota cuajada de rocío.

Tú tienes una pena y me la ocultas. ¿No sabes que la madre más sencilla sabe leer en el alma de sus hijos como tú en la cartilla?

¿Quieres que te adivine lo que sientes? Ven acá pilluelo, que con un par de besos en la frente disiparé las nubes de tu cielo.

Yo prorrumpí a llorar. Nada le dije; la causa de mis lágrimas ignoro, pero de vez en cuando se me oprime el corazón y lloro.

Ella inclinó la frente, pensativa, se turbó su pupila, y, enjugando sus ojos y los míos, me dijo más tranquila:

Llama siempre a tu madre cuando sufras, que vendrá, muerta o viva; si está en el mundo, a compartir tus penas, y si no a consolarte desde arriba.
Y lo hago así cuando la suerte ruda, como hoy, perturba de mi hogar la calma; ¡invoco el nombre de mi madre amada, y, entonces, siento que se ensancha el alma!

QUERIDA LECTORA:

Mil gracias por su bella colaboración. Desafortunadamente ya no podrá ser publicada en el mes de mayo, pero todas las fechas son oportunas para  homenajear a las madres. Un abrazo de su amiga.

ANA

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CONFIDENCIAL PARA M.G.

Lamento muchísimo que tu novia hubiera tenido esa interrupción espontánea de su embarazo. Y puedo imaginar el sufrimiento que están experimentando, pero principalmente ella, y el hecho de que haya perdido su habitual alegría.

No veo otra manera de alentarla y conformarla,  que ambos comprendan que si sucedió eso fue porque así estaba escrito en el libro de su destino. Y, si son creyentes, sin importar la religión que practiquen, confiar en que Dios, en su infinita misericordia y amor, va a bendecirlos con no solamente uno sino varios hijos cuando se casen.

Ella no interrumpió voluntariamente su embarazo, si así hubiera sido, sería una carga moral muy grande durante toda su vida, pero fue un aborto espontáneo y eso es inevitable. Dile que cualquier cosa que hubieran hecho no habría sido útil para evitar lo que sucedió, así que lo único que queda es pedir a Dios que, cuando se casen, los bendiga con varios hijos.

Espero que con el paso de las semanas, ella se vaya resignando y aceptando lo sucedido como algo inevitable. No es la primera ni será la última mujer que pase por esa pena, pero recuerden que el tiempo es el mejor amigo para un dolor como el que están sufriendo.

Deseo sinceramente que pronto se recuperen ambos y pongan sus ojos en la esperanza y la serenidad en lugar del sufrimiento y la aflicción.

ANA
 
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La Reflexión de hoy:     
      
El obstáculo más grande el miedo.

El día más bello hoy.

El mayor error  darse por vencido.      
      
El más grande defecto el egoísmo.

La mejor distracción el trabajo.

La peor bancarrota el desánimo.

Los mejores maestros  los hijos.

El sentimiento más vil la envidia.   

El regalo más hermoso el perdón.

El mayor conocimiento Dios.

Lo más maravilloso del mundo el amor.

La felicidad más dulce la paz.