Con más gloria que pena
COMPARTIR
Si bien tradicionalmente el poder duro ha sido la principal avenida para que ciertos países consigan algunos de sus propósitos, en el mundo moderno, las estrategias de poder suave -definido por Nye como aquel que representa la habilidad de un país para obtener lo que se propone mediante la atracción y no a través de la fuerza o la retribución- podrían resultar igualmente eficaces y sustancialmente menos costosas políticamente.
Así parece entenderlo el Reino Unido de Gran Bretaña, que con sus prioridades internacionales en la mira, ha implementado una estrategia de diplomacia pública orientada no sólo a consolidar sus relaciones intergubernamentales sino también a buscar asociaciones y entablar conversaciones con otros entes que compartan su visión, entre los que se encuentran empresas, organizaciones sin fines de lucro, grupos de expertos (think-thanks), formadores de opinión, y básicamente con cualquier individuo susceptible de convertirse en una personalidades de la arena pública.
En esta estrategia de liderazgo internacional, pieza fundamental ha sido la cadena BBC, que opacada por una serie de escándalos recientes, celebró el día de ayer el 90 aniversario de su primera transmisión. La BBC, a través de diversos canales en radio, televisión e internet, cuyo contenido va desde noticieros hasta programaciones humorísticas, educativas y musicales, es quizás la fuente principal de entretenimiento, información, y cultura en la vida de un británico cualquiera. Más aún, habiendo servido como medio de comunicación entre la capital y su imperio, y pese aquellas voces que anticipaban la extinción del radio con la llegada de la era digital, la BBC ha desarrollado una cuantiosa y leal audiencia que recibe información en tiempo real a través de una extensa red de colaboradores que cubren acontecimientos de todo el mundo en 32 lenguas diferentes.
Si bien es oportuno el llamado a recuperar su reputación, como lamentables son los hechos que han ensombrecido su aniversario, desde el punto de vista de las relaciones internacionales, la BBC cumple 90 años con más gloria que pena, consolidada como un arsenal constante y renovable de ese poder inteligente que le ha permitido al Reino Unido tener un impacto que pocos países tienen en prácticamente todo el mundo.
@felipecarrera1