Centro Histórico de Saltillo: Una inmejorable oportunidad de revitalización urbana

Opinión
/ 20 noviembre 2024

De acuerdo con la fracción X del artículo 2 del Reglamento del Centro Histórico, Zonas e Inmuebles Protegidos del Municipio de Saltillo, su polígono comprende 60 manzanas, incluyendo los inmuebles de ambas aceras de las calles que lo delimitan.

El polígono anterior, que comprendía 165 manzanas, fue reducido en 2013 con la adopción del referido nuevo reglamento, dejando aparentemente las restantes 105 manzanas como una forma de “zona de amortiguamiento” para el polígono actual.

TE PUEDE INTERESAR: Ciudad y pertenencia. Un vistazo al Ágora ateniense

En el diagnóstico realizado para la actualización del Plan Director de Desarrollo Urbano de Saltillo se identificaron en el Centro Histórico cerca de 30 hectáreas de vacíos urbanos y 27 hectáreas de estacionamiento, con una densidad de 50 habitantes por hectárea.

Estos números, en el papel, parecieran describir un lugar con características precarias desde la perspectiva de su habitabilidad, dando la impresión de un lugar de difícil acceso y de carencia de los satisfactores necesarios para hacerlo atractivo.

Sin embargo, este importante polígono es el mejor conectado de la Ciudad. La mayor parte de las rutas de transporte público pasan por el Centro Histórico, convirtiendo al corazón de Saltillo en el centro de convergencia por excelencia de la movilidad urbana.

Vale la pena también mencionar que, aunque existen deficiencias en el cuidado de las banquetas del polígono, la caminabilidad es la forma de movilidad por excelencia, considerando además que el mejor inventario de andadores y banquetas se tiene aquí.

En materia de servicios públicos, que son indispensables para la habitabilidad, esta área los tiene asegurados. Están garantizados en la zona los servicios de recolección de basura, abastecimiento de agua potable, alumbrado público, entre otros.

Además, el equipamiento urbano es vasto y diversificado. Dentro de su perímetro encontramos plazas, parques, establecimientos de salud, escuelas de distintos niveles educativos, centros comerciales, dependencias públicas, sólo por mencionar algunos.

Asimismo, se cuenta con una serie de inmuebles históricos que conforman un valioso conjunto patrimonial para nuestra Ciudad. No es casualidad que la identidad de la capital coahuilense encuentre en el centro de la ciudad su principal apuntalador.

Siendo este el panorama, la pregunta obligada es: ¿por qué la gente no opta por vivir en el Centro Histórico? Si bien la pregunta no admite una respuesta única, existen distintas consideraciones de lo que se podría hacer para lograr la revitalización de este sector.

Por principio de cuentas podemos considerar la oportunidad de aprovechar la infraestructura existente. Si bien existen inmuebles e infraestructura deteriorada o en desuso, hay la posibilidad de rehabilitación y de mantenimiento para su mejor disfrute.

La optimización de servicios públicos ya instalados es también un tema relevante. El mejoramiento de la infraestructura de agua y drenaje, por ejemplo, es de enorme importancia, sobre todo si se pretende generar una capacidad de acogida importante.

Es también importante trabajar en la mejora de la conectividad. El diseño del Centro Histórico responde a un contexto donde los automóviles no eran la preocupación central, por lo que la movilidad peatonal y ciclista podrían ser alternativas viables por naturaleza.

Conviene también trabajar en el fortalecimiento de espacios comerciales tradicionales, mejorando su infraestructura, accesibilidad y condiciones de servicio. Si bien la inversión no sería considerable, sí lo sería el beneficio de hacerles más atractivos.

Por otro lado, conviene explorar las posibilidades de desarrollo de vivienda mixta en inmuebles abandonados o subutilizados. La demanda de vivienda que experimenta la zona metropolitana hace muy viable atraer inversiones que impacten en este rubro.

TE PUEDE INTERESAR: Centro Histórico de Saltillo enfrenta deterioro y descuido; piden intervención urgente

En el mismo sentido, la posibilidad de adaptación de antiguos inmuebles para uso mixto sería de relevancia para el rescate de inmuebles de valor patrimonial, cuyo uso responsable y congruente garantizaría su mantenimiento y conservación.

Sería interesante también explorar la posibilidad de incremento controlado de alturas. Bajo un riguroso respeto a consideraciones normativas sobre la protección del patrimonio y del paisaje urbano, la verticalidad sería una alternativa redituable.

Si estas acciones ponen en el centro de su gestión a las personas, el éxito está garantizado. La revitalización de espacios urbanos degradados hará viable pensar con mayor claridad en un futuro posible.

jruiz@imaginemoscs.org

COMENTARIOS

NUESTRO CONTENIDO PREMIUM