Congruencia o falta de paciencia: La renuncia de Tatiana Clouthier

Opinión
/ 7 octubre 2022
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La tía Tatis, en plena mañanera, renunció a la Secretaría de Economía. La fiel seguidora de la 4T, que en la campaña lo dio todo por Morena y AMLO, se bajó del barco antes de las elecciones de 2024. ¿Raro, no?, ¿por qué irse uno de los actores con mayor arrastre electoral justo antes de empezar la carrera presidencial? Esto me deja pensando si se bajó o la bajaron del barco.

Recordemos que Tatiana Clouthier “renunció” a una diputación federal en el 2018 para entrar a la Secretaría de Economía, después de una votación muy peculiar: la militarización. ¿Casualidad? En política no existen. Esta semana se aprobó en el Senado dejar en las calles al ejército hasta el 2028, y pues parece que la tía Tatis ya puede volver al Congreso.

Otro punto para recalcar es el T-MEC (antes TLCAN), el cual ha hecho mucho ruido en los últimos meses por el no respeto a los temas laborales y reforma energética. El famoso Capítulo 8, el llamado escudo de López Obrador para defender a PEMEX y la CFE sobre la “soberanía” que quiere/deben guardar las paraestatales y la no inversión extranjera en ese sector. Esto que “se le olvida” al Presidente que los Tratados Internacionales, como el T-MEC, deben estar por encima de la Constitución.

¿Será que Tatiana Clouthier prefirió salirse antes que explotara esa bomba de tiempo?, ¿fue congruencia a sus ideales y creencias?, ¿o simplemente se desesperó?

Lo que no se puede dudar es que la campaña del 2018 no hubiera sido lo mismo sin ella. Tatiana Clouthier aportó un acercamiento al Grupo Monterrey y provocó el apoyo (algunos de los empresarios desde el 2012) de ciertos actores económicos importantes, empezando por el mismo Alfonso Romo. Aunado a lo que el apellido Clouthier aportaba a la campaña y la frescura con la Tatiana “tía Tatis” se acercó a las redes sociales y los millennials.

Hasta el momento ha habido 15 cambios en el gabinete legal, 40 si sumamos al gabinete ampliado de López Obrador. No es cualquier cosa, el cambio de liderazgos enfrenta problemas de seguimiento y generación de resultados reales. Con una inflación por los cielos (en algunos momentos y lugares del país alcanzando el 10 por ciento) más toda la implementación del T-MEC. No es un buen momento para cambiar de liderazgo en la Secretaría de Economía.

Aunque queramos líderes mesiánicos o Santa Claus, que vengan a solucionarnos todos los problemas, el país necesita instituciones. Es importante que haya continuidad en los proyectos y programas independientemente de quién esté al mando. Esto solo se logra a través de reglas claras y metodologías fuertes, pero sobre todo de contrapesos reales de las acciones de gobierno.

Necesitamos construir instituciones que respondan a los intereses de las ciudadanas y ciudadanos. Necesitamos estar informados, criticar lo que no nos parezca, pero sobre todo actuar en consecuencia. Necesitamos más y mejores #CiudadanosdeTiempoCompleto.

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