El nuevo esquema de confianza fiscal hace justicia a los pequeños contribuyentes

En la miscelánea fiscal para el ejercicio del 2022, recientemente aprobada en el Congreso de la Unión, se subscribió el nuevo esquema de confianza de recaudación fiscal que busca aumentar la base de contribuyentes y la recaudación de impuestos; además, pretende eliminar prácticas fiscales mal habidas, como la evasión fiscal que en los últimos 4 años osciló entre 1 billón y 1.5 billones de pesos. La cantidad equivale a la tercera parte del presupuesto federal, según las estimaciones del Servicio de Administración Tributaria –SAT-.

El nuevo Régimen de Simplificación de Confianza –RESICO- para la recaudación tributaria va dirigido a los micro, pequeños y medianos contribuyentes, como las personas físicas con actividades empresariales. El esquema de confianza pretende adherir a 10 millones de nuevos contribuyentes. Este nuevo régimen fiscal beneficia a los contribuyentes de menores ingresos que podrán tener sus impuestos calculados automáticamente mediante un innovador sistema virtual robotizado que creará logaritmos para el cálculo tributario, de manera que las declaraciones estarán programadas y el Impuesto Sobre la Renta –ISR- a pagar mensualmente se calculará a partir del Comprobante Fiscal Digital por Internet –CFDI-. Por lo tanto, el objetivo final es incrementar en 30 por ciento la cantidad de contribuyentes según las estimaciones de la autoridad fiscal.

Podrán tributar en el esquema de confianza aquellas personas físicas con actividades empresariales con ingresos anuales de hasta 3.5 millones de pesos. En el caso de las personas morales, podrán entrar a este régimen las que hayan obtenido ingresos menores a 35 millones de pesos en el ejercicio. De modo que, el gobierno federal está cumpliendo con su compromiso de acabar con la evasión fiscal e impulsar beneficios fiscales a las y los micro, pequeños y medianos comerciantes y empresarios –Mypimes- que han sido castigados por décadas en el modelo neoliberal. Durante la pandemia las Mypimes fueron las más afectadas, es el momento de hacer justicia por su contribución a la economía del país.

Los beneficios del esquema de confianza a personas físicas que realizan actividad empresarial –que ya tributan o tributarán por primera vez- serán la mayor simplificación tributaria, es decir, que busca reducir al mínimo los trámites burocráticos y el gasto en especialistas o contadores para identificar cómo o cuánto entregar de impuestos, consiste en una serie de cuotas fijas que establecen cuánto se debe pagar, en función de cuánto se ingrese. Otro punto relevante es el cobro menor de tasa del Impuesto Sobre la Renta, oscilando en un piso de 300 mil pesos de ingreso pagarán un ISR de 1 por ciento a un techo de 3.5 millones de pesos de ingresos contribuyendo con un máximo del 2.5 por ciento de Impuesto Sobre la Renta.

Por otra parte, las ventajas del nuevo régimen de confianza de las personas o sociedades morales son los pagos en esquema a flujo de efectivo, se acumularán los ingresos de las facturas expedidas y efectivamente pagadas, menos los gastos efectivamente realizados. “Es decir, la empresa pagará por lo que realmente cobre, no por lo que facture”. Se acelerará la depreciación de las inversiones de manera más rápida que en el régimen general, incluyendo el equipo de oficina.

Por fin el proyecto de la cuarta transformación está haciendo justicia a aquellos pequeños contribuyentes que son el sustento fiscal y económico del país, que por décadas fueron despreciados por los gobiernos neoliberales y castigados con regímenes fiscales, mientras que a los grandes contribuyentes los premiaban con paraísos fiscales, deducciones tributarias y eran omisos en la evasión fiscal. Aquel cuento mediático de “Pepe y Toño” que eran la Mypimes el motor de la economía porque aportaban 9 de cada 10 empleos finalmente es una realidad, la historia está haciendo justicia para las y los comerciantes mexicanos que cada día se enfrentan a la adversidad y voracidad del mercado y a las prácticas monopólicas que imponen a la economía nacional.

@AntoniolCastroV

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