Mes patrio. Militares coahuilenses en Dolores, Hidalgo
COMPARTIR
Don Miguel Hidalgo y Costilla inició la lucha por la Independencia de México cuando era cura párroco en la población de Dolores, estado de Guanajuato. Ahí se conserva la casa que habitó el llamado Padre de la Independencia de México, junto a la parroquia de Dolores. La casa de Hidalgo tiene una larga historia desde que diera el grito que animó la batalla. Igual ha sido cuartel que ha sufrido el abandono, federal y estatal, y fue usufructuada por particulares. La Nación volvió a tomar la propiedad por las leyes de Reforma, y cuando el presidente Juárez se vio obligado a abandonar la capital de la República a causa de la invasión francesa y la imposición del emperador Maximiliano, en camino hacia el norte con su familia y sus ministros, se refugió en la casa de Hidalgo el 6 de junio de 1863 y ahí instaló temporalmente los Supremos Poderes de la Nación.
TE PUEDE INTERESAR: Comienza el mes patrio. Mexicanos al grito de guerra...
Al estar por primera vez en la casa del Padre de la Independencia, el presidente Juárez expidió un decreto que ordenaba se abriera un registro en el que debían consignarse los nombres y los pensamientos de los viajeros visitantes de aquel lugar. Se pusieron entonces en la casa unos simples cuadernos para el efecto. El primero se abrió con el decreto manuscrito firmado por Juárez y al calce las firmas estampadas de los acompañantes del presidente. Poco más de un año después, en septiembre de 1864, llegó a la casa el entonces emperador de México, enemigo de Juárez, Maximiliano de Austria. Dispuso éste que tal registro se llevara cuidadosamente y que las libretas se encuadernaran en un libro con pastas de madera forradas de terciopelo y con adornos de plata. Él mismo escribió en sus páginas, a modo de premonición: “Un pueblo que bajo la protección y con la bendición de Dios funda su independencia sobre la libertad y la ley, y tiene una sola voluntad, es invencible y puede elevar su frente con orgullo”. Vencido finalmente el Imperio, Maximiliano fue fusilado en 1867 por el gobierno republicano y, tal como lo había dicho él, el pueblo mexicano pudo recuperar, invencible y orgulloso, el gobierno de su territorio.
Con el transcurso del tiempo, aquel libro de visitantes se convirtió en un minucioso registro de pensamientos, pasiones y proclamas de liberales, conservadores, militares, políticos, poetas y hombres y mujeres del pueblo mexicano, que los plasmaron de su puño y letra en verso o en prosa, inspirados en los más intensos sentimientos patrióticos al visitar la Casa de Hidalgo. Asimismo, registra los pensamientos de numerosos extranjeros. De muchos no se sabe más que el nombre.
El periodista y editor Ireneo Paz, recogió los pensamientos de los firmantes de 1863 a 1874, y los publicó en un libro con el título “Álbum de Hidalgo”. Nueve años después, en 1883, cuando quiso hacer una nueva edición, mandó a un escribano a que copiara los registros restantes. El libro había desaparecido. Sin embargo, la primera edición había conservado algunos versos escritos por militares coahuilenses a lo largo de más de una década. Ahí puede leerse este cuarteto dedicado a Hidalgo y Costilla por un improvisado versificador de nombre Maximino Andrade, quien seguramente era el primer trompeta de la banda militar: “Diciendo ¡Viva el honor!/ aquí sentado en la silla, / aquí te escribe, Costilla, / un verso el primer pistón”. Y junto a este se encuentran dos cuartetos compuestos por militares coahuilenses que hacen mención de la entidad en sus versos. El primero, Rafael Ortiz, dice: “Y por tu heroico valor, / tu alma en la tumba reposa, / tú fuiste libertador / de Coahuila de Zaragoza”; y el segundo, escrito por un oficial de nombre Romualdo Dávila: “Héroe, fuiste memorable, / ya existes en una losa:/ Un jefe que aquí te escribe, / de Coahuila de Zaragoza”.
TE PUEDE INTERESAR: ¡Independencia y más! Estas son las efemérides y fechas importantes de septiembre 2024
Con toda seguridad, visitar la casa donde vivió el iniciador de las luchas de independencia exaltaría intensamente el concepto de Patria y Libertad excitando un profundo sentimiento patriótico por la defensa de un pueblo que, apenas lograda su independencia y en plena formación como país libre, hubo de enfrentar la intervención norteamericana primero y pocos años después la invasión francesa. Siglo y medio después, ¿qué nos queda del concepto Patria?