Esencialismo

Esta frase cobra sentido ahora que nos encontramos dándole forma a un nuevo estilo de vida en donde “podremos hacer muchas cosas, pero no todas las cosas”. 

Ante tanto que debemos atender, ¿cómo podemos distinguir entre lo importante y lo urgente para rendir y disfrutar más? ¿Cómo ser más prácticos y vivir con mayor simplicidad? “Esencialismo” según Greg McKeown es la disciplina que se orienta a hacer las cosas necesarias para lograr los resultados más importantes—y nada más. 

Vivimos en un mundo en donde existen muchos ladrones de tiempo y de energía disfrazados de peticiones, compromisos e invitaciones a los que decimos SI por agradar, pertenecer o no ofender, y eso en ocasiones nos aleja de nuestro objetivo de vida. Para vivir el esencialismo es fundamental reforzar nuestra habilidad para descartar, declinar o simplemente dejar pasar aquello que no va alineado a nuestros objetivos y valores.

El esencialismo se basa en tres fundamentos:

1. Tú elijes. Tú elijes cómo disponer de tu tiempo, tu energía y tus recursos. Eres el único dueño legítimo de tu vida, tu libertad y tu propiedad.

2. Solo unas pocas cosas importan realmente Enfocarte en estas últimas es el secreto de la productividad, y la felicidad.

3. Puedes hacer cualquier cosa, pero solo una cosa. Solo podemos estar en donde esta nuestra atención y lenguaje. No te sobrecargues.

Para reconocer eso que es valioso para ti, tómate unos minutos para responder: ¿Qué te inspira y apasiona? ¿Qué sabes hacer bien? ¿Qué necesita el mundo? ¿Qué te hace feliz? ¿A quién amas? En las respuestas a estas preguntas encontrarás pistas de aquello a lo que le debes decir SI.

La invitación es a dedicarte a menos cosas, círculos sociales o temas pero estar mejor en cada uno de ellos.

Dar un “NO” asertivo y respetuoso a través de respuestas sencillas pero firmes y actuar de manera congruente es la clave. Esto te hará sentir seguro, tranquilo y con mayor control de tu vida. Si ante estas respuestas algunas personas cercanas a ti se sorprenden, recuérdales que estás rechazando la invitación, el planteamiento o el proyecto, pero no a la persona. 

Ahora bien, antes de dar un “SI” es recomendable que medites tu respuesta, comprendas claramente lo que se te pide, revises si tienes los tiempos, herramientas y competencias y si te sientes cómodo haciéndolo. Duda siempre de aquello que vaya en contra de tus valores.

Recuerda que no importa la edad o la manera en cómo hemos sido siempre, todos podemos aprender a distribuir mejor nuestro tiempo y energía en aquello que nos genera valor. Cuando tenemos claridad en las prioridades y somos honestos es natural tomar decisiones esenciales y con ellos nuestro mundo se aligera.

El tema del esencialismo, requiere de una mente en paz y serena. Duerme, descansa y medita lo que es importante en tu vida, identifica aquello a lo que le vas a dedicar tus tardes, tus noches, tus ahorros… todos lo sabemos, vale la pena estar honestamente comprometido contigo y con todo aquello que más amas en la vida. Elige bien.

“Si no fijas las prioridades de tu vida, alguien más lo hará.”

- Greg McKeown