POLITICÓN: LOS ALIADOS

LOS ALIADOS

¡Vaya semana movida la que recién concluye! Diversos hechos confluyen en torno a la alianza PAN-PRI-PRD en Coahuila pero sin duda el que más especulaciones desató -y seguirá desatando- fue la intempestiva salida de las filas tricolores del lagunero Shamir Fernández. ¿Se trata de un golpe importante en la estructura del navío tricolor? Quienes conocen bien las cuestiones operativas a nivel de cancha coinciden: esto es más un asunto de presupuesto que mediático o de carisma. Porque, se nos explica, siendo cierto que Shamir ha sido el operador de una estructura territorial importante para el PRI, también lo es que no se trata de un mérito estrictamente personal, sino del resultado de contar con los recursos necesarios para llevar a cabo la tarea. ¿Va a recibir, en las praderas morenistas, a donde sin duda se encamina ahora, el mismo presupuesto? Si es así, entonces puede abrir un boquete importante. Pero también podría pasarle como a otros que, se asegura, han escuchado antes el canto de las sirenas guindas sólo para encontrarse con que la austeridad republicana también se extiende a las finanzas partidistas. O ese es el pretexto que les ponen.

LOS MORENOS

Con al menos tres tribus disputándose el control de la dirigencia partidista, los morenos coahuilenses llegan hoy, ¡por fin! a la celebración de su Congreso Estatal, del que surgirá una nueva dirigencia a nivel local. Los que hacen cálculos más fríos afirman que no hay nada escrito en términos de quién podría ser el nuevo dirigente, porque ningún grupo se impuso de forma contundente en la elección de los congresos distritales el pasado 31 de julio y por ello uno de los escenarios con menos probabilidad de concretarse es la elección de Diego del Bosque para seguir al frente de su partido. Pero tampoco el favorito de Ricardo Mejía, el “emprendedor” –como se describe en su perfil de redes sociales–, Raúl Sosa tiene garantizado el triunfo, porque aliados clave del “favorito de Palacio” han señalado que esa candidatura es intransitable. Nada nuevo por lo demás: lo que ocurre hoy en Morena es más o menos lo mismo que ha ocurrido siempre en los partidos de izquierda que se conforman por “tribus”: cada quien se atrinchera en sus posiciones y prefiere perder el partido que transigir con sus rivales internos. Hacia el atardecer de hoy conoceremos el desenlace de la historia.

EL RESTO

Todo mundo da por descontado que las huestes del PT, como lo vienen haciendo desde hace tiempo, irán de la mano con los morenos en los próximos comicios locales. Sin embargo, fuentes con acceso a información privilegiada aseguran que al contingente encabezado por Alberto Anaya cada vez le está gustando menos que, tras contarse los votos de cada elección local, ellos se queden en la orilla, como un partido marginal que ni siquiera puede acceder a las prerrogativas estatales porque todo se lo queda Morena. Por ello están sondeando la posibilidad de conformar una “alianza alterna” en Coahuila que, con un buen candidato al frente, pudiera darles más dividendos que la alianza con la cuatroté. ¿Se bajarán del barco morenista los que han sido aliados irrestrictos del partido de moda? Es probable, pero también lo es, dicen quienes conocen de las reuniones que hasta ahora se han realizado para explorar esta vía, que los petistas solamente estén tratando de vender caro su amor y obtener mejores condiciones en la negociación del convenio local para el 2023. Habrá que estar atentos a esta porción del escenario.

EL ÁRBITRO

A partir de las 11 de la mañana de este lunes, el mundillo político de Coahuila estará concentrado en la sesión del Consejo General del Instituto Nacional Electoral en la cual se votará la propuesta para designar al relevo de Gabriela de León en la presidencia del Instituto Electoral de Coahuila. Las propuestas -ya conocidas- son Larissa María Rodríguez Villarreal y Hugo Alejandro González Bazaldúa, cuyas trayectorias personales han estado siendo revisadas con microscopio por todos los interesados en que una u otra propuesta prevalezca, o que el tren se descarrile. Sobre lo que ocurrirá mañana pueden adelantarse un par de cosas: la primera es que no habrá ningún otro nombre sobre la mesa porque eso es imposible de acuerdo con las reglas de este procedimiento. Es decir, o se elige a uno de los señalados, o se declara desierta la convocatoria, lo cual obligaría a que el procedimiento se realice nuevamente desde cero. La otra es que, según las evidencias a la vista, la intención de algunos partidos, sobre todo Morena, es que ocurra justamente lo segundo y por ello se han lanzado con virulencia -aunque sin elementos sólidos- en contra de ambos perfiles. Veremos qué ocurre.