Un paseo culinario por el Centro Histórico

Iniciamos año deseando que sus paladares se afilen y sean cada vez más sensibles ante ésta inagotable fuente de saberes y costumbres mexicanas, que nos convierten en un gran comensal del cada día.

Como sabemos el Centro Histórico de Saltillo ha sido intervenido ya desde hace 2 años con obras de mejora, la cual ha dejado una huella profunda tanto en sus habitantes como en sus espacios de recreación y dejando mucho en el olvido el valor y presencia que es el Centro Histórico de una ciudad.

Estas obras han dejado en la orfandad a establecimientos que abren sus puertas día a día en medio de alcantarillas abiertas, tierra, falta de toda humanidad y criterios de empatía.

Parece que está cerca el día que podamos decir ¡chalupa y buenas! Y recuperar lo bello de nuestro hábitat. Entonces empezamos a perseguir esa romántica escena de una caminata en la “Nueva General Cepeda” dándonos el gusto de que no sea un deporte extremo de agujeros, registros y tubos expuestos, para llegar a Amore Mio y la cafetería galería Índigo. Un romance entre la plaza San Francisco y un bello corazón de listones con deseos que llenan de experiencia a quienes disfrutan de una pizza o pastas, café y arte. Das vuelta y llegas a este sitio cósmico del Ojo de Venado. Relajado de traguitos coquetos, con arte, buenos vinilos, ambiente y el peculiar anfitrionismo de sus dueños que te hacen sentir parte de los ojos del venado. Los compadres sitio de culto de la benemérita calle de Juarez. Al igual que ya la democrática Casa Tiyahui ¡Que gozo su espacio! Así mismo la Misiones y sus enchiladitas. Güicho y Mina y su concepto de comida mexicana contemporánea que viene a darle ese toque de minimalismo rico a la cocina del Centro Histórico. Cherokee que cerró sus puertas. Un clásico de Saltillo con sus magistrales enchiladas rojas y esa carne que evoca recuerdos en las memorias de muchos saltillenses. Deseamos que vuelvan. Casa Vieja, lugar de desayunos en una casona bellísima y bien argumentada históricamente con elementos muy del Saltillo antiguo. Su patio es un joya. A su vez Casa 1900 ¡que diamantito! Con ese acueducto, lo impecable de la remodelación con arte buen gusto y una terraza para sentir como correr el viento.

Los lugares con tanta personalidad como el Dublín y todos los antes mencionados, Coralillo como una muestra de la nueva arquitectura en casas históricas con buenos drinks y buena comida y tengo que mencionar ¿por qué no? y con mucho gusto Las Delicias de mi general, lugar pintoresco, mexicano y de mucho corazón gastronómico.

Iré mencionado uno a uno sus virtudes gastronómicas porque aún más pero estos desde hace unos meses han estado en el ojo del huracán con las obras.

Cerca y que también cayó por añadidura el “no visite el centro”. Está la Cantina de Al Lado con botanas con un toque distintivo como lo es su botana. Y La Gloria Mesón, cosa bella de arquitectura y buen gusto. En los detalles está Dios. Sus desayunos son románticos en un ambiente que te lleva un sitio especial. Diente de León y su creativa mixologia y cocina árabe! En una casa que tiene estos arcos curiosamente muy arabescos.

Frida y Diego y la extensión de los personajes más irónicos de época de mexicanismo. Sus desayunos ya concurridos ahora ya en comidas y cenas. El Villa de Saltillo con esa vista a la Catedral y sus únicas tortillas de harina y café de olla. Tavola y esa masa madre que no tiene madre su ambientación bello bello y su gran panadería.

Flor y canela es un imperdible. Su estancia siempre será grata y satisfactoria. Nos faltan muchos en la siguiente seguro Brujas, Baricci y muchos tendrán su reseña de inicio de año lugares de mucha temática, un viaje creativo.

¡Así es el 25000! Relájese venga, camine y disfrute de lo mejor de la ciudad. Una tribu amorosa y muy apasionada los espera con ganas de seguir haciendo lo que nos apasiona.