Richard Burton, leyenda de un seductor
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La muerte del astro de la gran pantalla consternó hace 25 años a fans en todo el mundo: el 5 de agosto de 1984, Burton murió como consecuencia de un derrame cerebral. Sólo llegó a cumplir 58 años.
Londres, Inglaterra.- Era considerado uno de los mejores actores de su tiempo, pero Richard Burton no sólo se hizo famoso por sus películas en Hollywood. Sus excesos con el alcohol y algunos escándalos acompañaron la vida de este actor británico.
Además, durante más de una década la opinión pública siguió los altibajos de su matrimonio con la diva Elizabeth Taylor.
La muerte del astro de la gran pantalla consternó hace 25 años a fans en todo el mundo: el 5 de agosto de 1984, Burton murió como consecuencia de un derrame cerebral. Sólo llegó a cumplir 58 años.
Burton tuvo, 22 años antes de su muerte, el encuentro quizá más decisivo de su vida. En el rodaje de Cleopatra, conoció a Elizabeth Taylor.
"El primer día, hubo un flechazo entre nosotros. No pudimos hacer nada en contra", recordaba la diva cuando conoció al hombre de ojos azules y voz profunda, quien era adorado por las mujeres.
Se casaron por primera vez en 1964. Parecían una pareja de ensueño, pero el matrimonio se convirtió en pesadilla. Entre otras razones, estuvo la envidia, porque Burton no ganó ningún Oscar a pesar de siete nominaciones, pero su mujer ya tenía dos.
"Nuestro amor es tan apasionado, que nos quema a los dos", dijo Burton en una ocasión. Taylor comparó el matrimonio con una "montaña rusa estática. Éramos como dos imanes, que se atraían irresistiblemente y que a la vez también se repelían sin piedad".
En 1974, Taylor y Burton se divorciaron. Un año después se volvieron a casar, pero se separaron definitivamente en 1976.
Una supuesta mirada a la vida cotidiana de la pareja la ofreció en 1965 la película "¿Quién teme a Virginia Woolf?" En ella, ambos encarnan a dos cónyuges que se hacen la vida imposible el uno al otro.
Burton recibió en 1966 por esa película y por El espía que surgió del frío el premio a la Mejor Interpretación masculina de la Academia Británica del Cine.
Ex empleados de la pareja relataron los excesos de Burton con el alcohol, así como los insultos entre la pareja e incluso los estallidos de violencia.
El actor siempre bebía, pero después de separarse de Taylor, se entregó totalmente al alcohol, al grado de tomarse tres botellas al día.
"Vi el abismo y luego regresé a la vida", dijo el astro tras un tratamiento de desintoxicación, pero no sólo consumía alcohol. También era un fumador empedernido, ya que consumía hasta cien cigarrillos diarios.
A pesar de su talento para la gran pantalla y el escenario, la vida de Burton como actor en Estados Unidos no estaba dictada por el destino. "Me hice actor por casualidad. Nunca fue una vocación", dijo en una entrevista en 1977.
Y es que Richard Jenkins, su nombre real, nació en el pueblo de Pontrhyden, en el sur de Gales, como el duodécimo de 13 hijos de un minero. Ya muy pronto Burton tuvo que contribuir con trabajos ocasionales al mantenimiento de la familia.
El camino a los escenarios llegó con la ayuda de sumaestro y posterior mentor Philipp Burton. Éste corrigió primero el acento galés "imposible" de su discípulo y le consiguió una beca para estudiar inglés, italiano y literatura en Oxford.
Burton debutó sobre un escenario a los 18 años con la obra Druid's Rest, en el Royal Court Theatre en Liverpool. Más adelante, este gran seductor se hizo famoso sobre todo con sus interpretaciones de Shakespeare, entre otras, como Hamlet, Otelo o Enrique V.
Desde fines de los 40, comenzó a trabajar en el cine. Pero el éxito llegó en 1952 con la película de Hollywood My Cousin Rachel. Luego, protagonizó, entre otras, "Las lluvias de Ranchipur", "Mirando hacia atrás con ira", "El día más largo" o "La noche de la iguana".
Además de Liz Taylor, se casó con otras tres mujeres. Su última esposa, Sally Hay, estaba junto a él cuando murió en una clínica de Ginebra. Burton se había casado con la ex asistente de producción de la BBC sólo un año antes. El actor fue enterrado en Céligny, cerca de Ginebra.
Nuestro amor es tan apasionado, que nos quema a los dos."