Ana Frank, la niña que soñaba con ser escritora Y lo logró

Ana Frank es la niña alemana judía más famosa, su diario se ha convertido en un referente testimonial de cómo una familia vivió el acoso de los nazis en la Segunda Guerra Mundial; una vez que terminara el conflicto, ella soñaba con ser escritora o periodista, a los 15 años falleció, pero su padre, Otto Frank, logró cumplir ese anhelo al publicar lo plasmado por años en esa pequeña libreta que él le regaló.

La casa de atrás iba a ser el título del diario de Ana, ya que ese era el nombre del escondite donde ella, sus padres, su hermana mayor y otras cuatro personas estuvieron por más de dos años y medio escondidos.

La fascinación por esta chica ha llevado a que se la realización de película en su honor, varias obras de teatro, un museo, un memorial, 70 traducciones, una fundación que lleva su nombre y una variedad de estudios sobre sus escritos que narraron cómo vivía la familia Frank en Alemania, su huida a Ámsterdam, Holanda, los años escondidos en el refugio y hasta el inesperado y trágico arresto por parte de la Gestapo.

Símbolo del Holocausto

En la introducción a la primera edición del Diario de Ana Frank en Estados Unidos, la activista Eleanor Roosevelt lo describió como uno de los más sabios y conmovedores comentarios que he leído sobre la guerra y su impacto en los seres humanos. También, el escritor soviético Ilya Ehrenburg dijo que el libro es "una voz que habla por la de 6 millones; la voz no de un sabio o un poeta, sino la de una muchacha corriente".

La vida de Ana Frank reflejada en sus escritos la han convertido en un símbolo del Holocausto, uno muy humano y desgarrador, porque bastaban seguir escondidos unos cuantos meses para haber logrado ver el fin de la guerra. 

A esta chica que murió a los 15 años también se le ha visto como humanista, por ser una representante de la persecución, pero también por sus ideas plasmadas en ese diario.

Líderes políticos como Hillary Clinton la han usado como referencia, como en su discurso en 1994 al recibir el Premio Humanitario Elie Wiesel, cuando dijo que la vida de Ana Frank nos despierta frente a la locura de la indiferencia y el terrible precio que supone para nuestros jóvenes.

El líder sudafricano Nelson Mandela también se ha referido a Ana Frank como un personaje destacado y hasta comparó su historia con el apartheid con la de ella y los nazis: Porque estas creencias son evidentemente falsas, y porque fueron, y siempre serán desafiadas por los semejantes a Ana Frank, están destinadas al fracaso.

Logró ser escritora sin saberlo

Desde que Ana Frank acudía a clases le gustaba escribir, ella había dicho que sería escritora o periodista; mientras su familia sufrió acoso en Alemania y durante todo el tiempo que estuvieron en Ámsterdam escondidos, ella practicó con disciplina su escritura, tanto así que volvió a reescribir su diario en limpio para acomodarlo en forma de una novela que ella publicaría al terminar la guerra.

De este modo, su única obra no fue una casualidad, sino que ella siempre tuvo en mente lo que quería alcanzar, no lo vio en vida, pero su padre, Otto Frank, se encargó de que la historia de Ana fuese contada al mundo, él mismo declaró que este diario abarca tantas etapas de la vida que cada lector puede encontrar algo que lo conmueva.

Además de ello, la novela de Frank trata sobre la Segunda Guerra Mundial, pero se ha vuelto de temática humanitaria universal por describir y abordar temas de discriminación, persecución, segregación y también por reflejar momentos de vida cotidiana confrontados con un auto encierro obligado.

De haber sobrevivido a los campos de concentración, ¿habría sido una gran escritora Ana Frank? Tal vez muchos se han hecho esa pregunta imposible de responder, pero lo cierto es que con una obra logró tal vez mucho más de lo que ella hubiera soñado.



Por Cristina Salmerón/ Terra