'La TV le dio forma a mi carrera': Michael Douglas
COMPARTIR
Nuestro corresponsal en Los Ángeles charló con uno de los actores más queridos de la industria; el histrión recuerda sus años en la pantalla chica
Festejando nada menos que medio siglo desde que empezó su carrera como actor, Michael Douglas fue reconocido en el Festival de Televisión de Mónaco por el Príncipe Alberto II, con el premio ‘Crystal Nymph’. Y en un lugar tan famoso por las carreras y la aristocracia, como un verdadero Príncipe de Hollywood, Michael Douglas aceptó hablar de su propio ‘reinado’ de Hollywood en medio de la más famosa evolución del cine y la televisión.
¿Hasta qué punto aprecia los cambios que hoy revolucionan la televisión en comparación con el principio de su carrera como actor... hace algunos años atrás? “Es cierto, son 'algunos años', 50 para ser exactos. Y es una de las razones que me da para pensar un poco… Cuando yo recién empezaba en 'Las calles de San Francisco', en Estados Unidos sólo había dos estaciones de televisión. Estaban NBC y CBS, recién después surgió ABC como un canal nuevo donde yo después también empecé con la serie 'Kung Fú' (con David Carradine). Y eso fue hace 50 años, pero mira el Festival de TV de Mónaco, cumplió 59 años. Es increíble lo adelantado en el tiempo que estuvieron al momento de crearlo”.
¿Qué tan bien recuerda aquel primer día de trabajo, en la serie de TV de ‘Las Calles de San Francisco’ con alguien como Karl Malden que incluso llego a ser el Presidente de la Asociación de Actores de Hollywood? “El primer día en 'Las Calles de San Francisco' me subí a un auto de policía y tengo el orgullo de poder decir que soy muy buen conductor, porque siempre me gustaron las carreras de autos y cosas así. Pero cuando íbamos por una montaña, de repente me di cuenta que estábamos en el aire. Lo miré a Karl (Malden), Karl me miró a mí y paré el auto. ¡Yo pensé que me iban a despedir el primer día! Y Karl salió del auto gritando ‘Eso no es conducir normal, es de película. Me voy a cambiar la ropa interior’. Karl siempre había sido muy bueno como coprotagonista incluso cuando trabajo con Marlon Brando. Y en ese entonces entendí porque es que siempre trabajó con estrellas tan grandes”.
¿Le debe su éxito como actor a la TV o el cine? “La televisión para mí fue como la columna vertebral que le dio forma a mi carrera, porque con ‘Las Calles de San Francisco' filmábamos 26 episodios de una hora al año, durante ocho meses y medio, sin parar. Así fue como también aprendí cierta disciplina y un buen gusto por los guiones, porque cada semana teníamos un autor diferente, además de una estrella invitada. Eso terminó siendo la base de mi carrera en términos de elegir material y la gran razón por la que me convertí también en productor”.
¿Y el cine? “Supongo que la gente sabe que yo dejé la serie de televisión en pleno éxito, después de 4 años, para producir en cine ‘One Flew Over the Cuckoo's Nest'. Hay quienes pensaron que yo estaba loco por dejar semejante éxito pero todo quedó en la historia cuando ganamos el Oscar. Pero claro, la transición en aquel entonces de la televisión al cine, para cualquier actor, era muy pero muy difícil. Eran dos estilos de carreras muy separadas y creo que antes que yo solamente Steve McQueen y Clint Eastwood la habían podido lograr. Para aprovechar el éxito de la televisión uno quería ser estrella de cine porque siempre estuvo esa idea que en televisión te pueden ver gratis pero en el cine, hay que pagar entrada. Y fíjate hoy, 50 años después, pagamos por ver TV ahora” (Risas).
Cuando Michael Douglas nació en Nueva Jersey, el 25 de Septiembre de 1944, los padres recién estaban empezando a trabajar como actores. Pero 50 años atrás, cuando Michael decidió seguir los mismos pasos, el padre Kirk Douglas ya se había convertido en una de las más grandes leyendas de Hollywood con tres nominaciones al Oscar. El peso de la fama en el apellido tampoco le pesó demasiado, cuando en televisión, Michael se convirtió en uno de los más famosos protagonistas de su generación, con aquella serie de televisión ‘Las Calles de San Francisco’, donde incluso recibió tres premios Emmy y llegó a dirigir dos episodios. Hasta cuando trabajó detrás de cámaras, entró al mundo del cine por la puerta grande, ganando un Premio Oscar como productor del clásico del cine ‘One Flew Over the Cuckoo's Nest’ (que ahora incluso está produciendo con una versión en Netflix, en formato de serie de televisión). Por supuesto, se lució mucho más delante de cámaras, protagonizando los éxitos más emblemáticos de Hollywood, en géneros tan diferentes como la acción al estilo Indiana Jones de ‘Romancing with the Stone’ y ‘The Jewel of the Nile’; el suspenso psicológico de ‘Atracción Fatal’; la realidad de ‘Wall Street’ (donde también ganó un Oscar como Mejor Actor) o la comedia de humor negro de ‘La Guerra de los Roses’. Aprovechando el rol del villano más querido del cine, también planeó el asesinato de Gwyneth Paltrow en ‘A Perfect Murder’ y hasta fue un jefe del mundo del narcotráfico en ‘Traffic’, antes de filmar en familia con su padre Kirk Douglas y el hijo Cameron, la comedia ‘It Runs in the Family’. Las historias más románticas, fueron mucho más realistas que el cine, cuando después de un matrimonio de 23 años con Diandra Douglas, se casó el 18 de Noviembre del año 2000, con Catherine Zeta Jones (Madre de sus hijos Dylan y Carys). Con el nuevo milenio, él también decidió volver al mundo de la TV, ganando otro premio Emmy por interpretar en HBO la vida del pianista Liberace, con Matt Damon, en ‘Behind The Candelabra’. Y totalmente recuperado de un peligroso cáncer de garganta, demuestra que a los 75 años es posible mantener el éxito de un grande, con la serie de Netflix ‘The Kominsky Method’ donde lo volvieron a nominar para el premio Emmy como Mejor Actor.
¿Qué opina sobre la revolución de la televisión con la competencia entre los canales de televisión de cable y las salas de cine? “Pude vivirlo en persona cuando unos años atrás pensamos en filmar con Matt Damon, una historia que ningún otro estudio quiso filmar, sobre la vida del pianista Liberace, con ‘Behind The Candelabra’. Steven Soderbergh era el director y de verdad, ningún estudio la quería, hasta que la filmamos para HBO. Y al final fue muy bien recibida hasta en el Festival de Cannes”.
¿Y el mundo streaming de Netflix y Amazon? “Fijate que ciertas producciones que son muy difíciles de filmar están ahora siendo apadrinadas por los estudios de streaming y es una salida muy particular para los actores y la gente creativa donde importa más la historia de un personaje que un superhéroe con efectos especiales. Cuando Netflix me ofreció la oportunidad de hacer en serie ‘The Kominsky Method’ me pareció una maravillosa oportunidad de volver a la televisión, para filmar en sin comerciales, una comedia de media hora. Es verdad, ahora hay cientos de canales de TV. Pero la diferencia con el streaming, supongo que es la cuota mensual. Antes, en TV, se grababan series basados en la publicidad y por eso se filmaba tanto para el público que varía entre 25 y 45 años, porque las publicidades son las que pagaban todo. Pero la gran diferencia ahora, con los servicios de streaming, la gente no paga por ver un show, pagan por ser miembros y genera mucha más libertad a la creatividad porque no está anclada a un área determinada. Además, Netflix, por ejemplo, estrena todos sus shows al mismo tiempo, en todo el mundo, en 40 idiomas. Es realmente increíble lo que consiguieron”.
¿Entre los grandes actores famosos, al momento de trabajar juntos, también hay cierta competencia... como Netflix con el cine? “Cuando yo recién empezaba como actor, en ‘Las Calles de San Francisco’, con Karl Malden éramos los únicos actores regulares de la serie y todas las semanas teníamos una estrella invitada diferente, trabajábamos con alguien nuevo, todo el tiempo. Y así fue como yo también aprendí a encontrar el balance para hacer que otros actores se sientan tan cómodos como puedan, con el resto del grupo. Es algo que a mí siempre me pareció importante, que los otros actores se puedan lucir con su trabajo, porque es la forma de lograr que el proyecto también sea bueno. Yo incluso tuve oportunidades muy extrañas como cuando trabajé con Kathleen Turner y Danny DeVito en tres películas diferentes, con el factor de la comodidad extrema donde no teníamos que preocuparnos por meternos en el diálogo del otro. Y aunque a lo mejor yo era un poco más tímido 50 años atrás, siempre hice lo imposible por lograr que el ambiente de trabajo fuera el mejor, para todos los actores.
Apenas se necesitaron ocho episodios de Netflix para que una superestrella como Michael Douglas revolucionara el éxito de la TV, con la serie ‘The Kominsky Method’. El personaje de Sandy Kominsky tiene bastante en común, sobre la vida de un actor que supo conocer la fama en sus mejores épocas.
¿En ‘The Kominsky Method’ también volvió a trabajar con Danny DeVito en un episodio? “Sí, Danny DeVito es uno de mis más viejos amigos y él interpretó a un urólogo que tenía que hacerme un examen de próstata en la primera temporada… fue todo muy divertido.