‘La Llegada’: Lenguaje, tiempo y magia
Una de las mejores películas del año y una de las mejores cintas que se hayan hecho sobre invasiones alienígenas en la historia del cine
Calificación: 10 de diez
Si usted comprende el lenguaje de esta película, su forma de pensar cambiará. El cine es una comunicación con el espectador y, bueno, como toda conversación, no siempre se pueden entender ambas partes. Cuando los dos llegan a un entendimiento, sucede lo que me gustaría llamar magia. Esa es la palabra, no hay explicación lógica. Cuando una película logra hablar más allá de la pantalla y tocar un punto muy profundo en nuestro corazón. Tal vez “Arrival” (“La Llegada”) no le provocará este sentimiento, una poderosa y profunda conexión que, no me dejará mentir, sólo llegamos a tener con pocas personas a lo largo de nuestra vida. Es más, quizá le parezca un ser tan extraño, que le costará trabajo entenderlo. Déjeme servir de intérprete, al menos, para ayudar a que sepa que tiene frente a usted una de las mejores películas del año.
La cinta cuenta sobre un evento en que enormes naves extraterrestres llegan a posicionarse en distintas partes del mundo. Sin un orden aparente, estas estructuras de color negro, se encuentran flotando sin hacer el menor movimiento. Dentro hay unos tripulantes y para poder comunicarse con ellos y saber a qué han venido, llaman a la doctora Louise Banks (Amy Adams), una renombrada lingüista. Ella trabajará junto a Ian Donnelly (Jeremy Renner), un astrofísico, en la nave que se encuentra en Montana, donde harán todo lo posible por interpretar los símbolos que dos extraterrestres les muestran para poder entablar una conversación. Mientras la tensión aumenta en el resto del mundo, Louise descubrirá las profundas implicaciones de su trabajo.
Me siento como un científico poco capacitado para tratar de analizar esta cinta. De entrada me parece una obra demasiado inteligente. Como las mejores cintas de ciencia ficción, es un trabajo complejo, ideado con una precisión quirúrgica, que al momento de intentar desentrañarla me provoca una suprema intimidación. Me siento así como Louise cuando se encuentra por primera vez con los heptápodos (como nombran a los extraterrestres). Y me siento sobre todo maravillado, ante eso que al principio nombré como “magia”. Es decir, me refiero a ese sentimiento de enfrentarte a una obra cinematográfica que nos deslumbra, que nos recuerda lo que se debió sentir cuando vimos una película por primera vez en nuestras vidas. Y sí, yo sé que suena exagerado decir esto de una cinta sobre una invasión extraterrestre, pero no dudo que esta será recordada como una de las mejores de esa temática.
Sobre todo porque no es lo que usted imagina. Y esa capacidad para sorprender es una cualidad que ya pocas cintas de ciencia ficción (o cualquier género, si a esas vamos) tienen a estas alturas del mundo globalizado. “La Llegada” lo hace, así como cuando vimos por primera vez bajar a los extraterrestres de la nave de “Encuentros Cercanos del Tercer Tipo” (1977) de Spielberg. Y en esta ocasión no me refiero a elaborados efectos especiales, sino al sentido de toda la trama. La película no se trata de grandes explosiones, destrucción de ciudades, una batalla entre hombres y aliens malvados. La cinta es, primero que nada, un discurso sobre la comunicación y el lenguaje y después algo mucho, mucho más profundo. En otras palabras, este es un drama, más que cualquier otra cosa, de esos que usan una situación extraordinaria y ficticia para lanzar su mensaje.
Corro el riesgo de revelar demasiado sobre la trama y no quisiera hacerlo. Creo que entre menos se sepa de la película más se disfruta. Le puedo asegurar, sin embargo, que se va a encontrar con una historia que empuja el molde de la ciencia ficción y lo trabaja con mucho cuidado e inteligencia. De entrada lo que su contexto intenta hacer, y creo que logra con creces, es retratar lo más realista posible, cómo reaccionaría el mundo ante una situación así. Manteniendo un balance perfecto, trabajando las personalidades de sus personajes y hasta con mucho cuidado visual, entrega un escenario que es lo más cercano a la realidad ante una situación ficticia, con la que el séptimo arte ha especulado muchas veces a lo largo de su historia.
El tema de la comunicación con extraterrestres, de intentar entablar una conversación con ellos para saber sus motivaciones, es interesante casi por sí solo. El director es el canadiense Denis Villeneuve (que el año pasado sorprendió también con “Sicario”) y se basó en el relato corto “Story of Your Life” de Ted Chiang para esta cinta. Y esta premisa cobra mucho sentido con su sólida mano, pero además cuenta con un arma más poderosa que ningún extraterrestre podría tener jamás: la increíble actuación de Amy Adams. La actriz es espectacular en todos los matices que vemos en su personaje. Desde el miedo hasta la última gran transformación íntima del final. Sobra decir que tiene una gran química con Jeremy Renner, quien también entrega un papel bastante sólido, lo mismo que Forest Whitaker, que aunque aparece más brevemente, demuestra en pocos minutos por qué su nombre es sinónimo de calidad.
Al final, creo que el gran logro de esta película está más allá de cualquier palabra que pueda escribir. No digo que no se pueda desmenuzar y tratar de ver ciertos defectos, pero creo que eso sería un ejercicio ocioso y bastante irrelevante. Más que su argumento y la bellísima fotografía de Bradford Young, que también vale la pena destacar, esta cinta tiene una gran claridad en el tono y la emoción que busca transmitirnos. La historia es sencilla, pero es compleja; el mensaje es claro, pero inteligente. Su forma podrá ser sobresaliente. Lo que queda expuesto es sin duda digno de aplauso. Pero lo más importante es crear ese vínculo con el espectador. Esta es una historia humana, a pesar de que haya extraterrestres en ella y la palabra “humano” puede significar muchas cosas. Usted interprétela, traduzca y deje modificar su percepción.
El dato
>Director: Denis Villeneuve.
> Elenco: Amy Adams, Jeremy Renner, Forest Whitaker, Michael Stuhlbarg, Tzi Ma.
> Género: Ciencia ficción.
> Clasificación: B
> Duración: 114 minutos