Las nuevas caras de la anorexia
Cuando se detecta precozmente, en un 60 % de los casos se alcanza una remisión total de los síntomas y en un 20 % se cronifica.
“Minimizar este tipo de trastornos puede llevar a consecuencias nefastas”, ha advertido, en declaraciones a Efe, la doctora Montserrat Graell, coordinadora del servicio de psiquiatría y psicología del Hospital Niño Jesús de Madrid, en el que se integra la unidad de trastornos de alimentación del niño y del adolescente.
Con motivo de la celebración hoy, 30 de noviembre, del Día Internacional contra los trastornos alimenticios, esta psiquiatra “en pocas palabras” define la anorexia como “una alteración mental que deriva en una alteración de la conducta consistente en la obsesión por perder peso y en tener una imagen corporal distorsionada”.
Ello tiene que ver, según la doctora Graell, con el adelanto de la menarquia (primer episodio de la menstruación) que se está produciendo en todos los países occidentales. Y es que la entrada en la pubertad “enciende”, de alguna forma, la vulnerabilidad genética que puede existir.
Tampoco se puede afirmar que se esté produciendo un incremento de la prevalencia en los varones. La proporción de 9 chicas por cada chico se mantiene.
Lo que sí está ocurriendo, ha explicado esta psiquiatra, es que la enfermedad está ahora menos estigmatizada en los chavales y se ha avanzado en el diagnóstico de éstos: se detecta antes y de forma más certera. “Los chavales se han hecho visibles”, ha resumido.
No obstante, la doctora Graell quiere lanzar un mensaje de esperanza. Cuando se detecta precozmente, en un 60 % de los casos se alcanza una remisión total de los síntomas y en un 20 % se cronifica.
En el curso de la enfermedad también ha habido “un cambio importante”. Mientras en los 80 la mayoría de los pacientes eran diagnosticados en un estadio avanzado que requería su hospitalización, ahora gracias al diagnóstico precoz “llegan menos deteriorados y pueden recibir tratamiento ambulatorio”, bien en los centros de salud o en los hospitales de día.
Para Carlos Mur, coordinador científico de la Estrategia de Salud Mental del Sistema Nacional de Salud (SNS), en la anorexia crónica “hay que recuperar el concepto de persona” y la funcionalidad que el afectado ha perdido como consecuencia de la enfermedad.
Con este objetivo, la estrategia del Ministerio de Sanidad contempla la creación de un programa de atención domiciliaria, poniendo en marcha pisos terapéuticos que permitan la separación del entorno familiar.
“Esto es importante porque muchas veces el ámbito familiar perpetúa y cronifica el trastorno de conducta alimentaria”, ha explicado a Efe el doctor Mur.