¿Sentiste que enero duró una eternidad? La ciencia nos explica el porqué
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La llegada de un nuevo mes siempre es bastante emocionante por los retos, proyectos personales o compromisos que puede traer consigo... menos enero
Si eres de las personas que siente que enero tiene 365 días y sigue sin terminarse, debes saber que no eres el único, incluso las redes sociales se han llenado de diversos memes donde confirman que la eternidad de enero es un sentimiento universal, pero esto tiene una explicación científica, aquí te decimos por qué se siente que enero es el mes que dura todo un siglo.
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La llegada de un nuevo mes siempre es bastante emocionante por los retos, proyectos personales o compromisos que puede traer consigo, el problema es que a muchas personas no les agrada enero, ya que consideran que es el mes que dura una eternidad, aunque parezca una locura, este sentimiento tiene una explicación y aquí la compartimos contigo.
¿Por qué enero se siente como si fuera eterno?
De acuerdo con los especialistas, existen diversos factores, por lo que enero se siente como si durara un año entero. El Centro Champalimaud de Portugal explica que la dopamina es el neurotransmisor encargado de la percepción del paso del tiempo e influye de manera directa a la visión subjetiva que se tiene sobre cómo enero pasa más lento que el resto de los meses.
Por su parte, el Doctor en Psicología Experimental en el University College London, Zhenguang Cai, explica que cada persona tiene un reloj biológico, el cual se encuentra en el hipotálamo, una región del cerebro que, a través de la liberación de hormonas, es la encargada de regular diversas funciones corporales como la temperatura, sed, el hambre y el estado de ánimo.
El experto en percepción del tiempo afirmó que “es posible que el reiniciar el trabajo luego de las vacaciones de Navidad lleve mucho aburrimiento, comparado con la diversión que se siente durante la temporada decembrina, lo que puede llevar a tener la impresión de que el tiempo pasa más lento en enero”.
En conclusión, de acuerdo con ambas afirmaciones, las personas tienen la capacidad de experimentar el tiempo de diversas maneras y existen factores que pueden influir en su percepción; es decir, cuando están entretenidos y pasan un buen momento en compañía de sus seres queridos, el tiempo pasa demasiado rápido, como si “se fuera volando”, en cambio, si se siente solo o aburrido, el tiempo más lento.