Acepta ‘dreamer’ relación con pandilla; se acerca deportación
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A pesar de contar con un amparo, Daniel podría volver a México contra su voluntad
LOS ÁNGELES, CALIFORNIA.- Daniel Ramírez Medina, un “dreamer” mexicano que fue detenido pese a que está en un programa que lo protege, admitió tener vínculos con pandillas y haber sido arrestado antes, afirmó el Departamento de Justicia.
El mexicano, de 23 años, “declaró ‘no, ya no’, cuando se le preguntó si es que él está o ha estado involucrado en alguna actividad de pandillas”, se afirma en documentos que el departamento presentó ante la corte.
Ramírez, que fue traído a Estados Unidos a los siete años, está amparado por el plan de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), el cual fue promulgado por el expresidente Barack Obama con una orden ejecutiva en 2012. Permite que ciertos inmigrantes que llegaron ilegalmente a Estados Unidos cuando eran niños puedan permanecer en el país y obtener un permiso de trabajo.
El joven fue interrogado por los agentes de inmigración que lo arrestaron debido a un tatuaje que tiene, descrito en los documentos como un “tatuaje de las pandillas”.
Respondió que “solía andar con los Sureños en California”, que “huyó de California para escapar de las pandillas” y que “todavía anda” con pandilleros en el estado de Washington”, agregan los documentos.
NIEGA DEFENSA ARGUMENTOS
Mark Rosenbaum, uno de los abogados del acusado, dijo que los alegatos son falsos y que las autoridades identificaron mal el tatuaje.
El señor Ramírez no dijo estas cosas porque no son ciertas”, dijo el abogado en un comunicado. “Y si bien estos alegatos son inverosímiles e inventados, no serían evidencia suficiente para que el señor Ramírez sea una amenaza a la seguridad pública ni a la seguridad nacional”.
Ramírez fue detenido el viernes pasado en el suburbio de Des Moines, en Seattle. Su arresto desató un debate nacional sobre las prioridades migratorias del gobierno del presidente Donald Trump.
Algunas personas ven el arresto como el inicio de un ataque contra el DACA, mientras que las autoridades federales dicen que solo se trata de un ejercicio rutinario de su autoridad.
Ramírez tiene un hijo de tres años que es estadunidense, de acuerdo con sus abogados. Trabajó en los campos de cultivo de California antes de mudarse al estado de Washington, y luego pasó dos veces las revisiones de antecedentes penales necesarias para acogerse al DACA, agregaron los abogados.
La última vez que pasó una de estas revisiones fue hace casi un año y no tiene antecedentes delictivos, agregaron.
El dato
> Según el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), el padre del joven fue deportado ocho veces entre el 2000 y el 2006 y cumplió un año de prisión en el estado de Washington por un delito de narcotráfico.
Con información de Milenio/Excélsior