Amenaza crisis climática a especies en peligro

Por: Isabel Martínez Pita

El peligro de extinción de las especies es uno de los temas que más preocupan en la Cumbre del Clima 2019 que se celebró en Madrid, y el biólogo Miguel Delibes de Castro manifestó que “no sabemos cuántas especies hay porque nos faltan muchas por conocer, con lo cual, saber cuántas están en peligro de extinción es muy complicado”.

El prestigioso biólogo Miguel Delibes de Castro (Valladolid, 1947) indicó que “La International Union for Conservation of Nature (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza)(UICN)reconoce que dentro de la  especies que conocemos hay varios miles que están en peligro de extinción y alcanzan porcentajes importantes. Entre el 10 y el 20 por ciento en las aves y los mamíferos, incluso hay más dentro de los anfibios. Por ejemplo, entre los insectos hay especies amenazadas, pero hay millones de especies de insectos que tampoco conocemos”.

Entre los océanos y la tierra firme, según el biólogo, hijo del escritor Miguel Delibes, “la diversidad de vida es más grande en los océanos, donde hay especies más extrañas, pero en tierra firme existe un mayor número de especies, aunque puede haber, por ejemplo, muchas especies de escarabajos muy similares. Sin embargo, algún oceanógrafo podría decir lo contrario”.

MUEREN MÁS ESPECIES  DE LAS QUE APARECEN

Sin embargo, para Delibes esto no significa que haya espacios en el planeta sin descubrir porque “ahora mismo no hay ningún lugar donde no lleguen los satélites o los drones, pero eso es a un nivel muy superficial. Lo que sí es cierto es que en todo el mundo se descubren nuevas especies en cuanto uno empieza a investigar. Por ejemplo, en algunos grupos de hongos, pueden faltar por descubrir para la ciencia el 80 o el 90 por ciento de ellos”.

“A lo largo de la historia de la vida en la Tierra, entre el 97, 98 o 99 por ciento de la mayoría de las especies se han extinguido, pero  extinguirse quiere decir, en muchos casos, que han dado lugar a descendientes procedentes de ellas y que se han transformado en lo que hoy conocemos que es la vida”, señaló el especialista.

Según Delibes, “lo que está ocurriendo ahora es que el ritmo de desaparición de especies es mucho más alto que el ritmo de formación de especies nuevas. Lo normal es que las especies desaparezcan y les sustituyan, pero ahora desaparecen muchas más de las que puedan aparecer por evolución. Probablemente, el ritmo de desaparición de especies ahora es unas mil veces mayor que el ritmo normal y desaparecen mil veces más deprisa de lo que se crean otras”.

“También puede ocurrir que las especies actuales se vayan modificando sin dejar de ser las mismas para lograr adaptarse a las nuevas condiciones”, agregó el experto.

Miguel Delibes contó un hecho histórico que demuestra gráficamente la modificación de los animales para adaptarse ante nuevas condiciones ambientales:

 “Existía una especie de mariposa que era de color claro en Gran Bretaña, pero durante la Revolución Industrial el ambiente se llenó de hollín y las mariposas comenzaron a adquirir un color más oscuro para mimetizarse mejor con su ambiente”.

EL SER RACIONAL: CAUSA  DE LOS PROBLEMAS

En la actualidad, Delibes de Castro subrayó que mueren muchas más especies de las que aparecen.

“Las razones son una mezcla de muchas condiciones. Los científicos hablamos de un cambio global, que es mucho más que un cambio climático, y que implica, por ejemplo: la destrucción de los hábitats; el exceso de capturas en el mar; la sobrepesca; la contaminación y, desde luego, el cambio climático”, argumentó el biólogo.

“Es decir, a las especies que se tienen que ir moviendo les cuesta adaptarse,  pero hay algunas que no se pueden mover y todo ese conjunto de factores, ligados entre sí, hace que desaparezcan”, matizó.

“Ciertamente, hace sesenta o setenta millones de años, cuando un meteorito chocaba con la Tierra ningún ser vivo podía predecirlo ni imaginarlo”, afirmó, aunque para Miguel Delibes, la diferencia enorme con las situaciones del pasado es que “ahora la causa de los problemas es un ser racional que puede pensar, por lo que está en su mano evitarlo”.

Cuando se produjo la colisión con un meteorito se provocó una gran extinción, pero hubo especies que empezaron a recuperarse y siguieron evolucionando a partir de esa situación.

Aunque probablemente el 75 por ciento de las especies desaparecieran en unos cientos de miles de años pero no en el momento del choque, sino como consecuencia de calentamientos, incendios, etcétera.

“En la actualidad, el meteorito somos nosotros. La causa –según Delibes– no es ningún meteorito,  es una especie (los seres humanos) que ha crecido fuera de sus límites, explota todos los recursos y limita la existencia de los demás”, argumentó el biólogo, escritor y zoólogo.

SOBREVIVENCIA

Miguel Delibes de Castro, doctor en Ciencias Biológicas por la Universidad Complutense de Madrid, es profesor de investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Ha sido director de la Estación Biológica de Doñana (Huelva, sur de España) y miembro  de diversas organizaciones científicas y conservacionistas, tanto españolas como internacionales. También ha pertenecido al grupo de especialistas en nutrias de la UICN y actualmente es miembro del grupo de especialistas en félidos.

Es fundador y actual presidente de la Sociedad Española para la Conservación y Estudio de Mamíferos y fue asesor de la delegación española en la conferencia de Río de Janeiro sobre Biodiversidad, celebrada en junio de 1992 (Cumbre de Río).

También en su faceta de escritor ha publicado diversas obras de divulgación sobre temas relacionados con la naturaleza y, durante tres años, trabajó como redactor de la Enciclopedia Salvat de la Fauna, dirigida por Félix Rodríguez de la Fuente y traducida a más de quince idiomas.

De una extensa carrera como investigador, este hombre incansable que heredó de su padre el amor por la naturaleza y ha recibido muchos reconocimientos.

El gran trabajo de Miguel Delibes ha sido, sobre todo, su labor por la supervivencia del lince ibérico, un felino en constante peligro de desaparición.

“Me siento muy orgulloso de aprender muchas cosas sobre el lince ibérico, por ejemplo, que estaba en grave peligro de extinción y sobre cuáles eran las causas, lo que ha permitido que los políticos tomaran medidas para intentar conservarlo”, concluyó.

Según el biólogo: “Probablemente el ritmo de desaparición de especies ahora es unas mil veces mayor que el ritmo normal de desaparición  y desaparecen mil veces más deprisa de lo que se crean otras”.