Buscan tipificar como delitos el hostigamiento y abuso sexual en transporte
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"La autoridad está obligada a ofrecer un sistema de transporte seguro que brinde tranquilidad y protección al utilizarlo", expone la diputada Claudia Corichi García, de Movimiento Ciudadano
El hostigamiento y el abuso sexual cometidos a bordo del transporte público, podrían ser tipificados como delitos marcados en el Código Penal Federal.
A través de una iniciativa presentada por la diputada Claudia Corichi García, de Movimiento Ciudadano, se argumenta que, principalmente mujeres, "enfrentan a diario conductas agresivas que las autoridades han omitido sancionar adecuadamente".
"El transporte se ha vuelto peligroso para mujeres y niñas, quienes manifiestan ser víctimas de múltiples agresiones como chiflidos, tocamientos, palabras obscenas, acoso, intimidación, miradas lascivas, amenazas con fines sexuales, exhibicionismo y, en general, una serie de expresiones corporales o verbales que resultan ofensivas", argumenta la diputada.
El acoso, señala Corichi García, afecta el derecho humano a la movilidad, el cual permite a las personas decidir el transporte público que más les convenga.
"La autoridad está obligada a ofrecer un sistema de transporte seguro que brinde tranquilidad y protección al utilizarlo", expone.
La iniciativa, en análisis de comisiones en la Cámara de Diputados, busca adicionar la fracción V al artículo 266 Bis del Código Penal para incluir los delitos de abuso sexual y hostigamiento que sean cometidos a bordo del transporte público.
"En los vagones del Metro existe una gran cantidad de reportes de agresiones sexuales. Según el informe, a 100 días de la estrategia, ' 30-100 contra la violencia hacia las mujeres y niñas', los ataques se presentan con mayor regularidad en horas pico, es decir, de 6 a 10 de la mañana y de 14 a 16 horas", apunta.
El alcance del proyecto de adición a la ley castigaría también el hostigamiento en el servicio de taxis, sobre todo los que no están regulados por las autoridades.
"Enfrentar la enorme problemática de violencia sexual en el transporte implica eliminar taxis piratas y, sobre todo, transformar el modelo de concesiones de microbuses, así como promover una cultura de denuncia de todo tipo de agresiones y/o violencia, para fortalecer el respeto, seguridad, tranquilidad y confianza de las usuarias salvaguardando su integridad física y sexual”, concluye la iniciativa.