Cae allegado a Trump vinculado al ‘Rusiagate’

WASHINGTON.- Sam Clovis, un exfuncionario de la campaña de Donald Trump, retiró este jueves su postulación a un cargo en la secretaría de Agricultura, al quedar implicado en la investigación de la injerencia rusa que conduce el fiscal especial Robert Mueller.

Clovis señaló en una carta al presidente Trump: 

“No quiero ser una distracción o una influencia negativa. Los ataques implacables a usted y su equipo parecen ser un deporte sangriento que se intensifica día a día”, escribió Clovis.

Esta semana, Clovis fue identificado por el periódico The Washington Post como uno de los miembros de la campaña de Trump que mantuvo comunicaciones con George Papadopoulos, el asesor a cargo de los contactos con allegados a Rusia que decían tener “mugre” contra Hillary Clinton.

A partir de ello, se puso en duda las aptitudes de Clovis para ocupar el principal cargo científico en Agricultura, además de que meses atrás se declaró un escéptico del cambio climático.

Clovis permanecerá por el momento en su trabajo en el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA por sus siglas en inglés).

SIN ESCAPATORIA
Paul Manafort, el exasesor de campaña del presidente Donald Trump acusado de lavado de dinero y otros cargos, tiene fuertes lazos familiares y comunitarios y no hay riesgo de que se fugue, argumentaron ayer sus abogados en una presentación ante la justicia estadounidense.

Una fianza de 10 millones de dólares “será más que suficiente para asegurar su aparición a requerimiento” en cualquier procedimiento judicial, agregaron los abogados.

Manafort y su socio Rick Gates fueron acusados de lavado de dinero, fraude fiscal y otros cargos en el marco de una investigación sobre la interferencia de Rusia en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016. 

LO NIEGAN TODO
- Las autoridades rusas tacharon de “ridículas” y “al borde de la fantasía” las acusaciones de que orquestaron los ataques.
- El viceministro ruso de Exteriores, Sergei Ryabkov, expresó el miércoles que no había “ni un sólo trozo de prueba” para respaldar las acusaciones.
- Sin embargo, los blancos de Fancy Bear identificados cuentan una historia diferente y en más de 100 entrevistas, muchos culparon a Moscú por el ataque.