Cerca el adiós de Wayne Rooney
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A sus 31 años, el delantero del Manchester United, goleador récord del club con 250 tantos y de Inglaterra con 53, apenas puede sostener esa pelea en la que Ross Barkley, del Everton, también se ha ubicado entre tanto por delante de él.
Mientras Lukas Podolski tendrá el miércoles en Dortmund un clásico europeo para despedirse de la selección alemana de fútbol, Wayne Rooney apenas puede soñar con algo así en Inglaterra.
El hasta ahora capitán de los "pross" ni siquiera fue llamado por el seleccionador Gareth Southgate para el partido amistoso en Dortmund ante el campeón mundial, aunque el delantero le haya asegurado que está bien físicamente.
Y en el posterior duelo de clasificación mundialista ante Lituania tampoco estará el 119 veces internacional.
El futuro del equipo de los tres leones pertenece a otros futbolistas. El seleccionador, que considera a Rooney un clásico número 10, puso a jugar en esa posición últimamente a Dele Alli, de 20 años, o Adam Lallana, de 28.
"Los dos juegan muy bien, marcan para sus equipos y dan asistencias", explicó Southgate. "Hay también una competencia por el puesto. De otra manera no funciona".
A sus 31 años, el delantero del Manchester United, goleador récord del club con 250 tantos y de Inglaterra con 53, apenas puede sostener esa pelea en la que Ross Barkley, del Everton, también se ha ubicado entre tanto por delante de él.
En el United, Rooney se sienta cada vez más en el banquillo. Zlatan Ibrahimovic, Henrich Mchitarjan o Anthony Martial tiene prioridad para el técnico del equipo, José Mourinho, que también suele preferir al joven Marcus Rashford, éste sí convocado por Southgate.
Rooney descartó recientemente un cambio al fútbol chino. Pero los rumores de que el delantero, que alcanzó su cénit bajo las órdenes de Alex Ferguson, podría salir de Manchester este verano (boreal) tras 13 años en el club continúan.
Rashford, de 19 años, aseguró que Rooney fue siempre su ejemplo. Sin embargo, el atacante no siempre se comportó ejemplarmente. En la decisión de Southgate de prescindir del jugador jugó también probablemente un papel el "affaire" del hotel de noviembre del año pasado.
Entonces, tras la victoria de Inglaterra por 3-0 contra Escocia en la clasificación mundialista, Rooney fue fotografiado borracho en la fiesta de una boda que se celebraba en el mismo hotel del equipo, y además vestido con la equipación de Inglaterra.
El jugador se disculpó por la metedura de pata, pero el prestigioso puesto de capitán de la selección podría haberlo perdido para siempre.
Southgate, que en octubre de 2016 -cuando aún era técnico interino- fue elogiado por los medios británicos por dejar ante Eslovenia a Rooney por primera vez en el banquillo, dejó entrever que el delantero Harry Kane podría llevar la cinta en el futuro.
"Harry tiene definitivamente cualidades de liderazgo", dijo el entrenador sobre el futbolista de 23 años. "Harry tiene opinión. Y también da instrucciones claras al grupo".
El atacante del Tottenham está momentáneamente fuera del equipo por una lesión de tobillo, pero aún así Rooney no encontró hueco en la convocatoria.
Si esto no fuera suficiente castigo para el que fuera favorito del público inglés, el seleccionador nominó para los dos partidos internacionales a Jermain Defoe, delantero del último clasificado de la Premier League, el Sunderland.
Defoe jugó por última vez para Inglaterra en noviembre de 2013 y tiene 34 años, por lo que no es ninguna opción de futuro. La llamada del delantero del Sunderland significa una cosa: el tiempo de Wayne Rooney en la selección inglesa parece terminado.