Conmemoran a estudiantes del Tec en sexto aniversario luctuoso

Monterrey.- La sentencia que hace días se les dictó a los militares que asesinaron al joven Jorge Otilio Cantú Cantú, abre una luz de esperanza para los familiares de los estudiantes del Tecnológico de Monterrey que fueron privados de la vida por miembros del Ejército.

La madrugada del 19 de marzo del 2010, Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Arredondo Verdugo fueron alcanzados por las balas del fuego cruzado entre sicarios y elementos castrenses.

En el marco del sexto aniversario luctuoso de su hijo, Jorge Antonio, la saltillense Rosa Elvia Mercado Alonso dijo que la resolución de un juez penal en el caso del joven Jorge Otilio les dio mucho gusto.

“Sí, es una esperanza muy grande, nos dio mucho gusto que se haya consignado el caso que se haya hecho justicia al doctor Otilio”, comentó la madre de familia.

La mujer asistió a la ceremonia, organizada por la Asamblea Estudiantil del Tec para recordar a los estudiantes fallecidos.
El evento tuvo lugar éste jueves y asistieron alumnos de distintas Universidades así como de Amnistía Internacional, todo pidieron justicia a las autoridades por el asesinato de los chicos.

La mamá de Jorge Antonio también dijo que hasta el momento el caso no lleva avances por lo que han tenido que recurrir ante la Procuraduría General de la República, (PGR) de manera directa.

“Pedimos justicia, sabemos que a veces las cosas son difíciles, pero lo único que nosotros queremos es justicia, nada más que se consigne el caso, sabemos que el expediente está terminado, entonces estamos esperando que se haga la justicia”, señaló.

Confesó que esperan que el caso de los jóvenes del Tecnológico de Monterrey corra la misma suerte que el de Jorge Otilio Cantú Cantú, acribillado a bordo de su camioneta cuando se dirigía a su trabajo porque fue confundido con un miembro de la delincuencia organizada.

 “No son intocables los militares y si cometen algún error, pues deben de ser castigados como en cualquier otro trabajo”, mencionó.

Recordó que los soldados truncaron dos vidas prometedoras de chicos sanos, excelentes estudiantes y hasta la fecha las autoridades no han hecho nada.

“No se ha logrado ahorita absolutamente nada el caso está todavía en averiguación previa, no se ha hecho nada, osea, se terminó el expediente, sabemos que ya lo terminaron, lo único que estamos esperando es que se consigue el caso”, indicó.

Respecto a los hechos registrados ese día fatídico, aseguró, que ya se hicieron todas las investigaciones necesarias.

“Se tomaron muchas declaraciones, por parte de familiares, por parte de amigos, pero de hecho, hasta ahí”, comentó.

La mujer dijo desconocer porque no se ha consignado  y por qué no  logró avanzar como el caso de Jorge Otilio.

“La verdad no sé, por qué, no sé cuál fue el proceso del doctor Otilio, pero en el caso de nosotros estuvo mucho tiempo detenido, en silencio, estuvo más de dos años, que hasta en el 2014, que se empezó a mover otra vez el caso”, externo.

Añadió que ha sido una lucha constante porque las autoridades les den una respuesta.

“Ahorita iniciamos el proceso directamente, osea que ya nos confiamos a organizaciones ni nada, nosotros fuimos directamente a México, entonces ahí fue en donde empezó se dio el avance en donde, vimos que se terminó, pero no sabemos por qué no se consigna”, explicó.

Por otra parte, Mercado Alonso compartió que siempre han tenido un gran apoyo por parte de los alumnos del Tec de Monterrey, pero no así de las autoridades de la institución.

“No, no tenemos el apoyo”, respondió.

Durante el acto, leyó una carta que le envío a la Procuradora General de la República,  Arely Gómez, en la que cuestiona por qué en tanto tiempo no se ha logrado la resolución del caso de los jóvenes.

 Por su parte, Armando Mercado Alonso, tío de Jorge Antonio, reveló que nunca olvidarán al joven y es una herida que les duele.

“Es algo que duele, es un muchacho que lo teníamos tan cerca, que no podemos olvidarlo, por eso es que luchamos porque su nombre sea limpiado”, sostuvo, en medio de sollozos.